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Voto de antonio lopez herraiz:
7
Comedia. Drama Bernardo se niega cumplir el deseo de su difunta esposa española, ya que lo considera un delirio: esparcir sus cenizas en la Costa del Sol, donde ella nació y solía ir todos los años a visitar a su hermana. Pero, después de que unos delincuentes profanen su tumba, decide tomar un avión y cumplir su deseo. (FILMAFFINITY)
4 de agosto de 2019
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Algunos de los que seguimos a Santi Amodeo desde su primer (y experimental) trabajo en solitario ('Astronautas') llevábamos bastante tiempo sin disfrutar de una obra que consideráramos plenamente suya, bien por haber aceptado proyectos que desprendían un cierto aroma a trabajo de encargo ('¿Quién mató a Bambi?') o, sin perder de forma tan obvia su firma autoral, al plegarse a las exigencias de meter con calzador a un rostro popular que no encajaba en el papel. Aunque a 'Cabeza de perro' todavía se le debe reconocer el mérito de ser una de las pocas películas buenas en las que han participado Juan José Ballesta y -la, por aquel entonces, primeriza- Adriana Ugarte.
Al igual que en su ópera prima, Amodeo juega a la baza de dos (o más) desconocidos a los que separa un abismo generacional -y, en este caso, geográfico- pero a los que las circunstancias obligan a comprenderse. Bernardo es un profesor de arquitectura que viajará desde Argentina hasta la Costa del Sol para esparcir las cenizas de su difunta esposa. Una vez ponga el pie en España, conocerá a Abi y Amalia que, a su manera, tratarán de ayudarle a cumplir con la última voluntad de su mujer.
Lo cierto es que cada nueva incursión de Oscar Martínez en una coproducción hispanoargentina resulta cada vez más grata y es mejor recibida, y por mi parte sólo lamento no haber descubierto antes de 'El ciudadano ilustre' (2017, Mariano Cohn & Gastón Duprat) a este Christian Clavier porteño que, en la madurez, se ha ido especializando en interpretar a personajes malhumorados, antipáticos y cínicos.
Ingrid García-Jonsson se confirma como una infatigable presencia -últimamente adscrita de forma más asidua a la comedia- habitual en el cine nacional, mientras que Carlos Areces demuestra lo que muchos sabíamos desde hace tiempo. La etiqueta de 'actor chanante' ya ha quedado definitivamente atrás.
antonio lopez herraiz
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