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España España · Madrid
Voto de Eduargil:
7
Thriller Basada en una historia real ocurrida en los años 80, narra cómo un policía estadounidense se infiltra en una banda de narcos colombianos. Para lograr ese objetivo, Robert Mazur (Bryan Cranston) se infiltrará junto a Kathy Ertz (Diane Kruger), quien fingirá ser su futura esposa y Emir Abreu (John Leguizamo), un policía con métodos poco tradicionales para codearse con la cúpula de la organización criminal y ser parte de la mayor operación ... [+]
22 de diciembre de 2016
21 de 27 usuarios han encontrado esta crítica útil
La vida de Pablo Escobar, llamado “el rey de la cocaína”, y todo lo relacionado con su imperio de la droga ha proporcionado numeroso material para libros (Matar a Pablo Escobar, de Mark Bowden), televisión (La reciente serie Narcos del canal Netflix) y cine (Escobar: Paraíso Perdido, 2014). En la década de los años 80 el gobierno de los Estados Unidos puso en práctica una serie de estrategias dirigidas a poner freno a todo el flujo de droga que entraba y salía del país. Una de ellas fue introducir agentes infiltrados dentro de la estructura mafiosa del cartel colombiano como nos cuenta Brad Furman en Infiltrado a través del agente de aduanas Robert Mazur interpretado magistralmente por Bryan Cranston, asociado inevitablemente por su papel del antihéroe Walter White en la serie Breaking Bad, como ese inicial padre de familia afable y cordial con cáncer que entra en el lado oscuro, en una espiral de destrucción sin retorno, para convertirse en algo parecido a un psicópata y pasar de honrado químico a cocinero de metanfetamina.

El guión de la película escrito por la madre del director, Ellen Sue Brown, está basado en hechos reales recogidos en el libro escrito por el propio Robert Mazur donde adopta la identidad secreta de Bob Musella, un hombre de negocios con múltiples empresas dispuesto a mover su dinero a través del mundo de la droga. Robert Mazur, a punto de jubilarse, se mete en esta complicada misión asumiendo que será la última para poder disfrutar de su familia, con la finalidad de paralizar una de las organizaciones criminales más notorias en el mundo. Su compañero de viaje y socio en esta operación policial es Emir Abreu, interpretado por el actor colombiano John Leguizamo, agente con una energía irresistible, ama y disfruta con su trabajo, es el contacto con los colombianos y posee un informante dentro. La actriz Diane Kruger interpreta a la policía Kathy Ertz como la pareja y futura esposa de Mazur en la farsa policial, algo inexperta pero con mucha capacidad para la actuación y una gran versatilidad para adaptarse a todo tipo de situaciones complicadas. La química entre ambos es perfecta y la tensión sexual es constante durante toda la misión. Por último, los espectadores españoles reconoceremos rápidamente en el reparto dos caras de nuestro cine patrio, la actriz palentina Elena Anaya ganadora al Premio Goya como Mejor Actriz en la Piel que Habito (2011), en el papel de Gloria Alcaino, la mujer del narcotraficante y brazo derecho de Pablo Escobar, Roberto Alcaino (Benjamín Bratt), y el actor mallorquín Simón Andreu, como el narcotraficante Gonzalo Mora.

Es difícil cuando vemos Infiltrado no acordarnos de Donnie Brasco (Mike Newell, 1997) ya que ambas películas tratan de policías infiltrados dentro de estructuras mafiosas, con familias que deben abandonar y proteger de manera provisional para que no obstaculicen su trabajo, y consiguen ganarse la confianza de la organización criminal e ir escalando poco a poco puestos para poder desarticular toda su estructura. A medida que contemplamos como se desarrolla y fortalece una auténtica relación de amistad entre Roberto Alcaino y Robert Muzar sabemos que éste terminará sintiéndose culpable al tener que traicionar a su nuevo amigo como ya vimos antes a Al Pacino en Donnie Brasco (1997) o a Johnny Depp en Blow (2001). A pesar de que estamos ante una película que no nos ofrece muchas cosas nuevas, que ya hemos visto reiteradas veces y con bastantes escenas predecibles, Brad Furman logra mantener una fuerte intensidad a lo largo de las dos horas que dura la película consiguiendo realizar un thriller tenso y emocionante.

Lo más destacado de la película es observar a dos personalidades tan diferentes y distintas, Mazur y Abreu, como son capaces de encajar y complementarse para formar un equipo perfecto. Esta fórmula de la pareja de policías antagónica obligados a trabajar juntos y que terminan por entenderse es muy típica en el género policiaco y ha dado lugar a importantes duetos como Ryan Gosling y Russell Crowe en la reciente Dos buenos tipos (2016) u otras más clásicas como Denzel Washignton y Ethan Hawke en Training Day (2001) o Michael Douglas y Andy García en Black Rain (1989) entre otras muchas de una gran lista. Pero en Infiltrado hay que destacar por encima de todo la más que sobresaliente actuación de Bryan Cranston como Robert Mazur, un personaje obsesivo pero sin perder nunca la cabeza que sabe exactamente cuando el peligro está acechando en cada esquina, frente la habilidad de Abreu para manejar cualquier situación y adaptarse e integrarse perfectamente a ese estilo de vida del mundo criminal.

Todas mis críticas en:
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Eduargil
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