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Voto de Limonde:
6
6,9
3.775
Comedia. Drama
Siete amigos que lo son desde hace años (tres parejas y un soltero) se reencuentran en una cena en la que deciden jugar a un juego extraño y arriesgado: ponen sus smartphone sobre la mesa y al grito de “no tenemos nada que ocultar”, deciden compartir los mensajes y las llamadas que cada uno de ellos reciba durante la noche, en una especie de ruleta rusa a golpe de SMS y tonos de llamada.
25 de marzo de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Iba a ver la versión española, la dirigida por Alex de la Iglesia, pero al leer las críticas mencionaban que era una copia absoluta de esta primera versión italiana.
Así que, al César lo que es del César que para eso en este caso la película es italiana, y me decante por la primigenia.
Me ha decepcionado un poco a raíz de las buenas críticas que presentaba. Ante una película de factura sencilla siempre espero algo más de su trama, de sus guiones y de las interpretaciones pero en este caso: espero, espero, espero... y aquello no alcanza a convertirse en una película notable. En principio pinta bien: una cena de amigos, una introducción donde se van juntando y como dice la sinopsis comienzan a jugar a hacer público que dicen sus smartphones. Y con todo lo que podrían decir al final dicen siempre lo mismo. El tema. Una y otra vez con más o menos gravedad pero el mismo tema en diversas vertientes, el de siempre hasta que llega a parecer una telenovela por su enroque y sus giros en busca de una seriedad que no venía al caso. Mientras la veo ya imagino uno u otro modo de que aquello hubiese tenido algo más de sustancia.
Se acaba la cena y me quedo con ganas del postre o más bien de un stripoker.
El monotema, si es que ustedes no saben ya de cuál se trata.. en el spoiler.
Así que, al César lo que es del César que para eso en este caso la película es italiana, y me decante por la primigenia.
Me ha decepcionado un poco a raíz de las buenas críticas que presentaba. Ante una película de factura sencilla siempre espero algo más de su trama, de sus guiones y de las interpretaciones pero en este caso: espero, espero, espero... y aquello no alcanza a convertirse en una película notable. En principio pinta bien: una cena de amigos, una introducción donde se van juntando y como dice la sinopsis comienzan a jugar a hacer público que dicen sus smartphones. Y con todo lo que podrían decir al final dicen siempre lo mismo. El tema. Una y otra vez con más o menos gravedad pero el mismo tema en diversas vertientes, el de siempre hasta que llega a parecer una telenovela por su enroque y sus giros en busca de una seriedad que no venía al caso. Mientras la veo ya imagino uno u otro modo de que aquello hubiese tenido algo más de sustancia.
Se acaba la cena y me quedo con ganas del postre o más bien de un stripoker.
El monotema, si es que ustedes no saben ya de cuál se trata.. en el spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Iba a titular esta crítica algo así como "más cuernos que un guiso de caracoles" pero por temor a desvelarles algo de la película opte por algo más correcto.
Francamente no se cuánto de amigos tienen los comensales ni cuánto de representatividad de la sociedad italiana. Pero apañados estamos si en la vida real se calca este saco de infidelidades. Tampoco creo que fueran íntimos íntimos, a lo sumo, unos amigos de estos que surgen algún tiempo en tu vida.
Esos 'secretones' que esconden no son para generar reacciones tan tremendas. Es tan importante ponerse tetas? Es que no van a darse cuenta? Su pareja plástico, tendrá que decírselo en algún momento,no?
Y del gay, que me dicen? Entra por las puertas y ya sabe uno que esta saliendo con un hombre. No se huelen nada sus amigos? Es para tanto? O es por meter el discurso contra la homofobia? Porque si son tan amigos pues no cuesta ni 10 segundos apoyarlo.
Y sobre el chanchullo del accidente pues a alguno fijo se le cuenta y seguro que hasta lo ánima diciéndole que es lo más inteligente puesto que son amigos y los amigos se apoyan no son fiscales.
Nada igual de solos y despeñados en los sofás me quede yo.
Francamente no se cuánto de amigos tienen los comensales ni cuánto de representatividad de la sociedad italiana. Pero apañados estamos si en la vida real se calca este saco de infidelidades. Tampoco creo que fueran íntimos íntimos, a lo sumo, unos amigos de estos que surgen algún tiempo en tu vida.
Esos 'secretones' que esconden no son para generar reacciones tan tremendas. Es tan importante ponerse tetas? Es que no van a darse cuenta? Su pareja plástico, tendrá que decírselo en algún momento,no?
Y del gay, que me dicen? Entra por las puertas y ya sabe uno que esta saliendo con un hombre. No se huelen nada sus amigos? Es para tanto? O es por meter el discurso contra la homofobia? Porque si son tan amigos pues no cuesta ni 10 segundos apoyarlo.
Y sobre el chanchullo del accidente pues a alguno fijo se le cuenta y seguro que hasta lo ánima diciéndole que es lo más inteligente puesto que son amigos y los amigos se apoyan no son fiscales.
Nada igual de solos y despeñados en los sofás me quede yo.