Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de dani:
9
Drama Fred Ballinger (Michael Caine), un gran director de orquesta, pasa unas vacaciones en un hotel de los Alpes con su hija Lena y su amigo Mick, un director de cine al que le cuesta acabar su última película. Fred hace tiempo que ha renunciado a su carrera musical, pero hay alguien que quiere que vuelva a trabajar; desde Londres llega un emisario de la reina Isabel, que debe convencerlo para dirigir un concierto en el Palacio de ... [+]
16 de octubre de 2015
122 de 138 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tuve la suerte de ver esta película bajo unas circunstancias muy favorables: con muchas ganas de ver el siguiente trabajo de Sorrentino tras la magnífica “La gran belleza”, sin apenas referencias acerca del argumento y en el marco del festival de Sitges con lo que eso conlleva: estreno, cine a rebosar, auditorio con pantalla gigante, ambiente de festival, primera fila, audio increíble..., y varias semanas antes de su estreno en salas, con lo que nadie me iba a influenciar. El contexto me acompañaba, y la película no me defraudó, a pesar del peligro que conlleva invariablemente la siguiente película que un director hace tras una obra maestra.
Lo primero que me llamó la atención fue que había escuchado “rumores” acerca de que esta película la había hecho con las sobras de “La gran belleza”. Pues sí que debía tener metraje sobrante para poder hacer dos películas con todos los actores diferentes, rodada en dos países diferentes y en un idioma diferente!!!!

En “La juventud” que nos ocupa aparecen Michael Caine y Harvey Keitel como una pareja de viejos amigos, más amigos que viejos, pasando unas vacaciones en un balneario para ricos en los alpes suizos y arreglando el mundo con sus divagaciones de viejunos. Para mí, de las mejores parejas cinematográficas de los últimos años. Aparece también Paul Dano como secundario de lujo (me sonaba este chico de cara asimétrica, no en vano ya había hecho buenos papeles en “Little Miss Sunshine”, “Prisoners” o “12 años de esclavitud”, pero sobretodo me gustó como protagonista de la sorprendente “Ruby Sparks”, de los mismos directores de “Little Miss Sunshine”). Aparece igualmente Rachel Weisz cumpliendo muy bien con el cometido de dar vida a la hija de Michael Caine; la tenía por medio desaparecida desde su papelón en “El jardinero fiel” (que le valió un Oscar y un Globo de Oro), la más discreta “Agora”, “My Blueberry nights” o “Langosta” (de Giorgos Lanthimos, y que todavía tengo pendiente, pues no me quito de la cabeza la estupenda “Canino”).

Así que tenemos bastantes ingredientes como para no considerar esta película como “sobrante” de “La gran belleza”. En lo que sí observo similitudes con su anterior trabajo es en el exquisito gusto por la estética, en el cuidado manejo de los tiempos y en la banda sonora como elemento fundamental del desarrollo del film (todo esto me recuerda a un poco al cine de Xavier Dolan, con las diferencias evidentes en otros aspectos). Todo ello junto me hizo pasar a mí y a los que me rodeaban en las butacas (estoy seguro) las mejores 2 horas de cine en lo que llevamos de año. Con una sonrisa permanente en la cara que no se borró tras los títulos de crédito y todavía asoma al recordar la película.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
dani
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow