Cuarto y último cortometraje -por ahora- protagonizado por la pareja británica más divertida de la historia de la animación, siendo el primero realizado tras el incendio de los estudios Aardman, donde se perdieron todos los moldes originales que dieron forma a los brillantes cortometrajes previos o la interesante película. "A Matter of Loaf and Death" (que se traduciría algo así como Un asunto de pan o muerte") se vuelve al origen, a los guiños al cine clásico y de serie B para encauzar una historia de misterio en la que varios panaderos han desaparecido sin dejar rastro y aún no han atrapado al responsable.

Wallace y Gromit, como no podía ser de otra forma, trabajan en esta ocasión como panaderos, lo que directamente les coloca en el punto de mira, dando así lugar a la historia. Lamentablemente, lo que empieza de maravilla (la primera escena es fantástica) se desinfla rápidamente naufragar en la nada más absoluta. La brillantez de "Los pantalones equivocados" o "Un esquilado apurado" no se ve en ningún momento, optando más por gags simples (algunos de ellos efectivos) y por contar una historia excesivamente convencional, introduciendo hasta dos subtramas de amor y un final, digamos, demasiado edulcorado. Técnicamente, cómo no, es irreprochable, pero lamentablemente parece que el alma de esta pareja se convirtió en cenizas con aquel terrible incendio en las oficinas de su estudio. Una lástima.