Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Pepe L:
5
Aventuras. Acción Inglaterra, siglo XIII. Robin Longstride (Russell Crowe), un magnífico arquero que ha luchado en las Cruzadas al servicio del rey Ricardo Corazón de León (Danny Huston), vuelve de Tierra Santa luchando contra los franceses y saqueando poblados. Cuando Ricardo muere alcanzado por una flecha, Robin se traslada a Nottingham para cumplir una promesa que hizo a Sir Robert Loxley (Douglas Hodge) antes de morir: llevar su espada a su padre, ... [+]
15 de mayo de 2010
17 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como sabía el maestro Ford, cuando los hechos se convierten en leyenda no es bueno imprimirlos. Suponiendo que esta película quisiera ser una revisión de la leyenda para mostrar la historia del "verdadero" Robin Hood, sería un empeño ridículo y estéril. ¿Acaso esta historieta de un arquero venido a más le llega a la suela de las chanclas al legendario Robin de los bosques? ¿Le gana en romanticismo, en verdad, en heroísmo, en pasión, en belleza al clásico de las novelas, al inolvidable Flynn, o incluso al zorro que dibujó Walt Disney? Entonces, ¿para qué contar esta historia? Print the legend!

Pero es que, además, el personaje retratado por Scott tiene la misma verdad histórica que Perico el de los Palotes. Estamos de acuerdo en que hablamos de cine, y en que no es necesario ni recomendable ese afán de verosimilitud, o ese empeño de reflejar la historia "real" (si es que tal cosa existe). De hecho, es imposible. No, esa no es ni puede ser la intención de ningún cineasta con dos dedos de frente, y tampoco es la de Scott. La suya es la de contar otra historia, introduciendo algunos (poquísimos) hechos históricos en la leyenda de Robin para construir así una nueva leyenda.

Hasta aquí bien. El problema es que esta leyenda carece por completo de emoción, solidez, verdad humana, pasión y sentido. No es más que una sucesión de hechos mal engarzados que no vienen de ninguna parte ni van a ninguna parte. Me da igual que se pase la historia por el forro (al fin y al cabo this is Hollywood). Lo que no le perdono es que haya rodado una película mala de solemnidad. Y conste que la apruebo porque, flecha va, flecha viene, uno no llega a aburrirse del todo, y porque el barro y la sangre salpican sobre las palomitas, y por Max Von Sidow, pero desde luego el guión parece obra de aquel ejército de monos mecanógrafos de Emil Borel (véase "teorema de los infinitos monos", Google mediante).

Una sarta de despropósitos, con unas pocas píldoras políticas buenistas bastante sonrojantes, que le hace a uno preguntarse por el sentido de este derroche de eurodólares.

Y además, cabrea el descarado planteamiento de una futura segunda parte. Por dios, ¿qué hemos hecho para merecer otra bofetada?
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Pepe L
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow