Ocho años después del estreno de "El regreso de la momia", el director Rob Cohen ("XxX", "A todo gas", "Dragon heart", etc...) nos trae la tercera parte de ésta buena saga de aventuras. Yo, la verdad, tenía las expectativas altas respecto a la película, pués la historia que nos iba a contar tenía su gancho, y además, se había mantenido prácticamente el reparto original de las dos anteriores momias (excepto Rachel Weisz, sustituida por Maria Bello).
El argumento nos traslada ahora a China, en vez de Egipto. Por tanto, el marco de la historia ya es totalmente diferente, lo que le daba algo de frescura al filme.
Sin embargo, cuando salí de la sala del cine, parecía algo (o más bien bastante) decepcionado. La película en sí está entretenida, eso no lo niego, pero le falta algo, quizás un guión con algo más de sentido (te da la sensación de que "las cosas pasan porque si), le falta también un villano con carisma, y, al fin y al cabo, aunque la historia se desarrolle en China, el planteamiento es igual que las dos anteriores momias (frescura a medias). Tampoco me gustó Maria Bello como Eve.
Terminando, una lastima ésta nueva Momia, ya que tenía buenos ingredientes para ser algo más, pero se quedó muy atrás respecto a sus dos antecesoras. Menos mal que Brendan Fraser no me decepcionó, el era el único que me hacía ver que estaba viendo una nueva entrega de la momia.