Haz click aquí para copiar la URL
Mauricio (Isla) Mauricio (Isla) · Albacete
Voto de Pataliebre:
7
Drama Robert Hansen, un joven agente de policía de Copenhague, ha sido destinado contra su voluntad a la pequeña localidad de Skarrild, para desempeñar labores de comisario. Este destino constituye para él la oportunidad de un nuevo comienzo: la posibilidad de regresar a su destino original en Copenhague dependerá de cómo rinda en esta localidad fronteriza. Pero a Robert le cuesta enormemente entender a la población local y sus actitudes, ... [+]
15 de enero de 2010
20 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tore André Flo era un carismático jugador noruego que destacó, primero, en la Liga de Noruega y con su selección hasta que finalmente fichó por el Chelsea en la Premier, cuando ésta aún era una liga carismática y triunfaban jugadores que eran grandes y no suplentes en su selección tipo Cesc. Aquellos partidos del Chelsea tenían algo especial: los veía con mi padre y eran eternos 0-0, hasta que en un momento dado iba a orinar y cuando volvía mi padre decía aquello de “han marcado”. Yo le preguntaba: “¿Quién?” y me contestaba: “El tipo ese de 2 metros”. Me quedaba incrédulo y soltaba un disparate tipo: “¿Pero ese tío está jugando?”. Tore André Flo siempre jugaba.
La cuestión es que eso pasó durante un largo periodo de tiempo, siempre marcaba cuando iba al servicio, tanto que al final pillé por costumbre cuando volvía de preguntar a mi padre si había marcado el grandullón. No hacía falta que me respondiera, tan solo me miraba y ya sabía la respuesta.

Todo esto viene a que todos están diciendo que "Terribly Happy" es una película coeniana pero danesa y no es cierto. No es coeniana, es floeniana o flonalda. Todos los habitantes de ese misterioso pueblecito son como Tore André, quizá sin tanta carisma pero sí similares en comportamiento. Parece que no están pero vaya que si están y la acaban liando.
Sin embargo, lo más curioso, es que el protagonista en ningún momento recuerda a Flo, sino a la trayectoria de ese genial lateral izquierdo llamado Raúl Bravo Sanfélix en el Madrid. Llegó allí como si nada, debutó, no tenía sitio hasta que un año entre bajas y que su puesto estaba tapado por Roberto (Carlos, no Trashorras) acabó de titular como central. Más o menos como el protagonista, va como si nada, es un pobre policia que no quiere destacar, pero lo acaba haciendo. Cuando alguien así cobra protagonismo siempre sabes que algo malo va a pasar. Después de eso, todo va a ir a peor, se van a ir evaporando y perdiendo protagonismo, viéndose superados por la situación hasta que finalmente quieren irse de una maldita vez de ese lugar.

Todo eso se junta con algunas características habituales de un thriller: un pueblo misterioso danés lleno de gigantones noruegos y el hecho de que la culpa siempre sea de las mujeres. Incluso en algún momento me pareció ver a Jordi Mollà por allí pero debió de ser alguna fantasia.

Al final de la película, mi padre me miró, puso aquella cara y me lo recordó:

- Gol del gigantón.
- ¿Pero si ese tío no sale en la película?.
- También decías que no jugaba los partidos, pero lo hacía y marcaba.

Por algo será.

Palabras claves: Tore André Flo, Raúl Bravo Sanfélix, pueblo misterioso, palabras claves.
Pataliebre
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow