Recuerdo que la vi empezada hace algunos años y no supe cómo se llamaba. Viendo aquí y allá, me encontré de nuevo con ella y decidí verla. Sin duda, que es una de las mejores películas mexicanas en este género y en general. Con un guión muy pulido y trabajado nos adentran de a poco en la mente del asesino. La actuación de Arturo de Cordova es muy notable, mostrándonos ese lado perturbado, esa obsesión que emana de su enajenado rostro nos hace sentir la psicopatía en todo su esplendor. A pesar de que nos cuentan todo desde el principio, la historia hace que no pierdas el interés gracias a los flash backs y a la destacada voz en off. Toda una joya de la cinematografía mexicana que aborda temas antes no vistos con tanta profundidad, que se adentra en las entrañas de lo psicológico de una brillante manera.