Esta película es mejor de lo que me esperaba, sobre todo toda la primera parte hasta que la empresa quiebra, después empieza la parte en la que vemos como el matrimonio se arruina y todo lo que tienen que hacer para sobrevivir. Hay hueco para las muecas típicas de Jim Carrey, pero no está toda la película haciendo el payaso, como en otras, está en su punto justo para no cansar y para hacer reír, porque esta película es graciosa, y eso es mucho decir de una comedia norteamericana, que suelen ser malísimas.
Además está basado en el caso real de varias empresas que se arruinaron en USA, y eso le hace adquirir un tono bastante interesante.