Haz click aquí para copiar la URL
China China · Qingoco
Voto de Txarly:
7
Comedia Comedia satírica en la que cuatro grandes directores italianos hacen una adaptación cinematográfica de algunos cuentos de Boccaccio. En "Renzo y Luciana", Monicelli narra la historia de un hombre y una mujer que se ven obligados a casarse en secreto para no perder su trabajo. En "Le tentazioni del dottor Antonio", dirigida por Fellini, un hombre se siente muy escandalizado por un cartel publicitario. En "Il lavoro" Visconti cuenta la ... [+]
19 de abril de 2009
41 de 44 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuatro grandes nos brindan sus relatos en esta entretenida obra, revisando la sociedad italiana de la época con empeño y clase.

Monicelli avanza este film con un descarnado retrato de la clase obrera italiana. La falta de espacios (casa, piscina, cine) unido a la obsesiva dependencia del trabajo y el dinero para obtener bienes materiales necesarios es resaltado por Monicelli de manera notable, si bien tiende un poco al pecado más generalizado de los italianos: la exageración. A pesar de ello, la lucha por sobrevivir y conseguir llevar una vida digna trabajando de sol a sol nos evoca a tiempos pasados mucho más difíciles que los actuales de manera detallada y concisa.

Fellini dirige con nervio y a pesar de algunas lagunas de ritmo exhibe una ácida crítica contra el puritanismo y la hipocresía de los estamentos más conservadores de una Italia que luchaba para hacerse un hueco entre la moderna Europa. Divertido pasatiempo (efectos especiales) para el director italiano antes de embarcarse en la que sería su obra maestra: Fellini 8 1/2.

Visconti rueda la que más me ha gustado de las tres. Una enorme Romy Schneider da cuerpo a una aristócrata desengañada del amor que planta cara a su consorte como consecuencia de sus devaneos por los distintos burdeles de Roma. Los matrimonios de conveniencia y la clase alta son mostrados con crudeza por el director, que dirige el climax de su mediometraje justo al punto exacto dónde debía, convirtiendo una obra sencilla en algo más que decente.

Vittorio de Sica emplea el voluptuoso cuerpo de la Loren en una rifa para catetos. La actriz se basta ella sola para mantener a raya a todo un pueblo de salidorros aldeanos. En pocas mujeres se ha visto tanto poderío en el Cine como del que siempre ha presumido la diva. De Sica se sirve del embrutecido campesinado italiano para realizar su particular visión de la parte de Italia menos cultivada y estancada ante los nuevos tiempos que corrían.

En definitiva, cuatro historias que tratan el amor y que denuncian las costumbres fascistas italianas todavía en uso en la década de los sesenta y que sirve para pasar un rato agradable entre tanta señora favorecida.
Txarly
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow