Theo Angelopulos fue unos de los directores más aclamados de Grecia. Un director que presentó a una Grecia gélida y distante. Muy distinta a las imágenes que la televisión y las postales nos quieren mostrar.
No estoy muy familiarizado con el cine de este director por lo que no puedo dar una opinión generalizada respecto a su cine.
Encuentro en El apicultor un filme que pudo dar para más. Sin grandes alardes técnicos, con escasos movimientos de cámara y dando gran uso al plano general, Angelopoulos, en mi opinión, nos quiere mostrar un retrato sobre el sin sentido de la vida y la búsqueda que los seres humanos hacemos constantemente de un destino indefinido.
El filme llega a ser bastante frío en ocasiones y hace que el espectador se desconecte de la historia. Comprendo que esto sea la intención del director, pero se pasa de lo necesario. Lo mejor del filme es la actuación del legendario actor Marcello Mastroianni, quien deja reflejado la soledad y el vacío del personaje a través de su lacónica actuación.