Sublime, exquisitez, grandiosidad. No encuentro calificativos para describir esta serie, pero no la vamos a descubrir hoy, todos sabemos lo buenísima que es.

Me dió un infarto al ver la nota tan baja de esta serie. La gente, si es que se les puede llamar así, no tienen ni pajolera idea de como se tiene que construir una serie.

La mejor actriz que ha chafado suelo español, Paz Padilla hace fácil lo imposible, estar siempre a un nivel altísimo en todos sus papeles. Si a ello le sumamos un actor secundario "er Chemita", que le da un toque de humor británico y llevadero durante largas temporadas, menudas novatadas le gastaban a este genuino de aspecto de alto cociente intelectual.

Por último, el argumento original y potencialmente adictivo, todos los españoles tenemos que estar orgullosos de que esto sea producto de nuestras cámaras. Que un mago salga de su lámpara y la líe de esa manera, buff que grandiosidad y que carcajadas.