Haz click aquí para copiar la URL
España España · madrid
Voto de saudade:
10
Romance. Comedia Elsa (China Zorrilla), que tiene 82 años, es una mujer llena de vitalidad y con una imaginación desbordante. Alfredo (Manuel Alexandre), algo más joven que ella, ha sido siempre un hombre convencional, serio y responsable. Al quedar viudo, desconcertado y angustiado por la ausencia de su mujer, su hija lo anima a mudarse a un apartamento más pequeño. Es entonces cuando conoce a Elsa, que es vecina suya. A partir de ese momento, ella ... [+]
19 de julio de 2008
20 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Amanece un nuevo día, suena otra vez el despertador. Los dedos, aún entumecidos de la inmovilidad de la noche se esfuerzan por apagar la alarma. Los ojos con cada rayo de luz que entra por la ventana se aprietan fuerte para continuar con la oscuridad onírica.

Sólo cinco minutos más...

Apartas el edredón y un escalofrío recorre el cuerpo, mientras los pies se erizan de frio al rozar el suelo.

Abres el grifo de la ducha y enciendes la cafetera. El cuerpo agradece, aún destemplado la manta de agua caliente que resbala por él.

Un nuevo día, un día de lugares comunes y realidades cercanas, de sorpresas al doblar cada esquina. Un nuevo día en el que ella; lunática atrevida, divertida, soñadora y azul sale a la calle. Un nuevo día que disfrutar como si fuera el último... quizá el primero.

Y de pronto, en ese mismo día, aparece él; responsable trabajador, leal, auténtico, algo parado y medroso, pero muy dulce. Y se cruzan. Y sus miradas se encuentran.

Ella le ha estado esperando siempre. Y áunque él no lo sepa, su vida le cambiará porque ella sabe la vida que se merece y quiere regalársela; ella es la única que sabe cómo hacerle feliz.

Y se conocen, y se encuentran. Y sus vidas ya no serán nunca las mismas. Y ella se reflejará en sus ojos, y él en su sonrisa. Y por fin, aquellos sueños no cumplidos, que no han hecho más que añadir una nueva arruga en cada cumpleaños, se realizarán. Y lo harán juntos. Y da igual el tiempo que les quede por vivir; porque la vida empezó el día en que por aquella calle empedrada se dieron la mano por primera vez.

Según voy escribiendo, Elsa va perdiendo su encantador acento bonaerense y su voz se antoja más madrileña que nunca. Y al bueno de Fred ya no le tiembla la voz, que cada vez es más cercana al deje del Guadalquivir.

¿Qué mas da? Elsa o Cristina; Óscar o Fred... De lo que se trata es de vivir y vivir a su lado. De lo que se trata es de la felicidad que llega sin fecha, porque no conoce edades. De lo que se trata es de reirse mordiéndose el labio, mientras tu auto chocó con el de detrás en una maniobra loca; al tiempo que en la radio suena: "Hoy puede ser un gran día, duro con él"
saudade
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow