Bueno, bueno... vaya como ponen algunos esta película. Ya sé que mi comentario llega un poco tarde, pero, al ver las críticas de algunos compañeros aquí, en esta santa casa, me he quedado boquiabierto...

Sobre todo, lo que me ha llamado la atención es la insistente equivocación en algunas críticas donde ponen a caldo la interpretación de Vin Diesel... que si un mueble más, que si inexpresivo, que si... etc... Vamos a ver... por favor, pensad un poquito. El personaje de Riddick no es un "humano normal", se supone que es una nueva raza de hombres con una serie de extraordinarias habilidades, etc, etc... Por lo tanto, el personaje debe ser... como es... rudo, intrigante, guerrero... ¿Os imaginais a Hugh Grant en el papel de Riddick?, por favor, creo que el casting acertó cuando seleccionaron a Vin Diesel desde Pitch Black, que por cierto, no estuvo nada mal... pero, a mi parecer, y teniendo en cuenta que en Crónicas se gastaron mucha más pasta que en su antecesora... Las crónicas de Riddick supera en varios puntos a ésta. No sólo por el derroche de buenos efectos especiales, sino por la misma historia, el gran universo que han mostrado en apenas 115 minutos, el diseño de producción, el ritmo frenético en muchos momentos... En fin... con Riddick se pasa unos minutos absolutamente entretenidos. Yo disfruté como un enano.

Y las comparaciones... ¿que pasa con las comparaciones? ¿Dune?, ¡¡¡¿Dune!!!? Con todo el respeto del mundo y a David Lynch, que encuentro un magnífico director, y Dune una magnífica película... en 1984. Ahora, quién viese por primera vez Dune, tendría que elegir bien la hora y la butaca... z, zz, zzz, zzzz, zzzzz..., hay momentos de verdadero muermo, me muermo, me duermo, z, zzz, zzzz. Y vuelvo a repetir, gritando si hace falta, que Dune, para mí, es una fantástica película, cuando la vi por primera vez en 1984 con 14 años. Me fascinó, de veras... Pero hoy... compararla con Riddick, es un sacro error.

En fin, Riddick no ofrece, ni tiene que ofrecer nada nuevo al mundo del cine de ciencia ficción, pero... tiene unos momentos absolutamente maravillosos.

Espero con ansias la tercera parte...