Pues sí, tiene algunos tufillos caóticos, como algún crítico ha declarado en esta casa... pero qué cojones!!!!, entretener, entretiene un mogollón. Todo ese pequeño caos argumental se cura con creces con una fotografía y buen hacer del director que es capaz de tenernos con el corazón en un puño en muchos pasajes.

Para mí es un peliculón dentro de su género. Ya me dejó boquiabierto la pasada Train to Bursan... Ésta? me ha vuelto a desencajar la mandíbula.

Lo bueno: dirección, banda sonora, fotografía e interpretaciones.
Lo malo: el señor caos que se esconde en las sombras y se asoma de vez en cuando... muy de vez en cuando. Poca cosa.

TOTALMENTE RECOMENDABLE.