Resulta meritorio que en estas épocas donde ya creemos haberlo visto todo, resulte una serie que logre llamar la atención en una temática ya saturada como el de las drogas y el crimen (Competir después de ver Breaking bad, Fargo y Narcos, no es fácil). Sabe desarrollar inteligentemente las situaciones saliéndose de los típicos clichés. Muchos dicen que es un breaking bad descafeinado, pero eso quiere decir que sabe algo. No creo que sea mejor que Breaking bad, pero vaya que cumple y eso es lo mínimo que uno pide para sentarse a verla.

Alguien se quejaba del villano (los narcos), y yo creo que eso depende del enfoque de la serie. Aquí tenemos a un tipo normal, enfrentado a varios tipos de peligro, y por tanto la fuerza de la serie está en ver cómo se mueve en medio de tales circunstancias y por tanto no es su interés desarrollar la psicología del villano en un inicio. Por otra parte, otro villano es la policía, con un tipo inteligente y ambicioso que dará problemas, y aquí sus motivaciones son mejor trabajadas. El otro punto fuerte está en la relación familiar del protagonista, no es tan lineal como en otras series.

Debo decir que merece la pena darle una oportunidad de ver el piloto. Otra gran sorpresa de parte de Netflix.