No serán pocas las ocasiones en las cuales hemos escuchado hablar fabulosamente bien de una película, y que, tras su visionado, nos hemos quedado un tanto decepcionados ya que debido a tanta crítica positiva esperábamos algo mejor. Pues bien, eso es lo que me ha pasado con este corto, pero totalmente al revés.
No tuve el placer de verlo justo antes de Coco (que por cierto es una nueva maravilla de Pixar), porque al parecer ya había habido quejas al respecto. Esto me decepcionó bastante, ya que soy un declarado fan de Frozen y tenía ganas de verlo. Eso sí, había leído varias críticas por lo que tampoco tenía demasiadas expectativas. Y cuando al fin pude verlo, pensé lo que se puede leer como título de esta crítica.

El corto, a pesar de lo que muchos dicen, está bastante bien. Y ya sé que he dicho que soy fan de Frozen, por lo que alguien podría pensar que por ese motivo me iba a gustar automáticamente, lo cual quiero dejar claro que no es cierto. Al contrario, como fan que soy, una bajada de nivel respecto al film me habría decepcionado mucho, y si fuera así lo reconocería, pero no es el caso.
Eso sí, entiendo que el corto no haya tenido una buena acogida, pero creo que no se debe al propio corto, sino cómo lo han presentado al público, por así decirlo. En primer lugar, si no has visto la película original, este pierde mucho. Disney sobreentiende que la gente que va a ver Coco ha visto Frozen, pero no para todos será así, e incluso habrá gente que la vio y no le gustó, por lo que probablemente el corto tampoco le gustará. Esto no sería mayor problema si fuera como Frozen Fever (7 minutos), pero este supera los 20 minutos, lo cual es bastante largo para ser un cortometraje. Esto para mí es algo bueno, porque teóricamente son 20 minutos más de regalo para pasarlo bien en el cine, pero comprendo que mucha gente no lo vea así, llegando al punto de llegar media hora más tarde para perdérselo. Además, Pixar se distingue por poner sus propios cortos antes de sus pelis, los cuales siempre sorprenden por su originalidad, y que Disney haya puesto uno de Frozen delante de Coco ha indignado a muchas personas. Otro problema es que al parecer hubo no poca gente que fue al cine sin saber de la existencia del corto o de su duración, y Disney tendría que haber avisado de ello correctamente.

Creo que estas eran las principales razones por las que el corto ha ganado tan mala fama. También hay gente que se quejaba porque el corto era muy blanco (lleno de gente blanca, nieve, el muñeco de nieve...) y lo veían una falta de respeto puesto que quitaba protagonismo a la gente latina de Coco... Pero bueno, esto no lo veo una razón justificada para odiarlo porque personalmente me parece una tontería con mayúsculas. ¿Conclusión de todo esto? Que Disney debería haberlo visto venir y haber pensado otra forma de sacarlo a la luz, tal vez como un especial televisivo, no sé, no soy un experto en estos temas, pero aunque se hayan asegurado de que lo vea mucha gente y lo que buscan es causar reacciones, no sé si eso compensa las pésimas críticas.

Habiendo expuesto los motivos del odio que ha causado este corto, ahora hablaré de este en sí y explicaré por qué creo que no se lo puede calificar como malo. La gente solo se ha fijado en lo peor y ha obviado injustamente sus virtudes, que en mi opinión son estas:
-La animación. Afortunadamente, Walt Disney Animation Studios sigue demostrando un gran nivel en cuanto a animación se refiere, y esto también incluye a los cortometrajes. Es verdaderamente una delicia, cuida los detalles y además tiene la oportunidad de mostrarnos los variopintos diseños de la población de Arendelle.
-La música. Si Frozen destacaba por sus canciones, el corto no iba a ser menos, aunque es cierto que tal vez no necesitaba estar tan cargado de canciones. Teniendo en cuenta que se trata simplemente de un cortometraje, el nivel de estas es realmente bueno, en parte por el gran reparto que tiene. Desprenden un aire muy navideño. Destaca entre todas "When we're together", que si bien no es "Let it go" es realmente preciosa. Tenía miedo de como lo solventaría el doblaje castellano, pero creo que han hecho un trabajo muy digno.
-El humor. Olaf no pierde la gracia y nos deja varios momentos que pueden lugar a alguna que otra carcajada. Yo personalmente recuerdo 3 a bote pronto con los que me reí mucho. Para nada entiendo las críticas que señalan al corto de aburrido.
-Relación Elsa y Anna. Ya lo demostraron en la película y lo vuelven a hacer, las escenas en las que las hermanas están juntas son de lo mejorcito. En este caso dejan el protagonismo a Olaf, pero la química entre ambas es innegable, es algo especial. No entraré en detalles, porque sería spoiler, pero la tradición que nos muestran que tenían me pareció un gran acierto y complementa perfectamente a la canción "Do you want to build a snowman?".
-La moraleja. El final es de lo mejor, no solo por la canción ya mencionada sino por el mensaje que transmite, el cual es muy navideño y nos dice que el verdadero significado de esas fiestas es estar juntos. Muy bonito y apropiado.
Si tuviera que ponerle alguna pega, sería que como he dicho antes no era necesario que hubiese tantas canciones, además tengo la impresión de que en el tramo intermedio flojea un poco. Por último, se deja claro que Olaf funciona perfectamente como personaje cómico secundario, pero no tanto si le damos más protagonismo, el cual tienen que llevarlo las hermanas para la secuela.

En definitiva, "Frozen: Una aventura de Olaf" es un cortometraje muy disfrutable el cual ha tenido la mala suerte de ser ensuciado por una mala fama debida a factores externos. Si eres seguidor de Frozen, te encantará, ya que complementa perfectamente a la primera película y te deja con un buen sabor de boca y esperanzas de cara a la secuela. Recomiendo su visionado e ignorar totalmente la crítica general, la cual es excesivamente dura.

Mi nota: 8,5