Haz click aquí para copiar la URL
Polonia Polonia · Suena Wagner y tengo ganas de invadir
Voto de Normelvis Bates:
7
Thriller. Ciencia ficción Un científico loco que roba un cargamento de un virus letal de un laboratorio del gobierno es perseguido por las autoridades. (FILMAFFINITY)
19 de marzo de 2013
13 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
El mundo está lleno de misterios, aunque algunos no tengan mucho interés y sean más bien aburridos. Fijaos en mí, sin ir más lejos. Un salido con al menos cuatro cuentas abiertas en este chiringuito decidió que debía montármelo con él y optó por el viejo truco de la pastilla de jabón, a ver si picaba y me agachaba a recogerla. A mi florecilla enamorada se la ve tan ofuscada que es incapaz de trenzar más de cinco líneas seguidas, lo cual me lleva a pensar que escribe sus, ejem, críticas con una sola mano mientras con la otra, cómo decirlo, se solaza pensando en mí. Y eso, aunque en el fondo me halague, me parece una auténtica guarrería: yo sólo trato con auténticos caballeros.

Pero ése no es el misterio. El misterio está en que en esta casa saben lo de mi admirador secreto y lo de su amor a desenfundar el fusil (el otro, no malpenséis) y lo de los mensajes (que harían las delicias, me imagino, de su adorado Fritz Lang) en los que me desea el exterminio a manos de los nazis, y lo de que haya pelis en que la mitad de las críticas sean suyas*, y poco hacen al respecto. Lo han echado de aquí varias veces, por copión y manipulador, pero siempre acaba volviendo, camuflado bajo un nuevo disfraz, para mandarme besitos en forma de voto negativo. Es comprensible, sin embargo, que mi asuntillo con mi amante cuadruplicado les pase inadvertido. Estarán muy ocupados recriminándole al sufrido autor de una crítica de (spoiler1) que haya revelado que (spoiler 2) muere (spoiler 3). Qué importarán unas cuentas más o menos. Calderilla.

En fin, el misterio de esta peli tampoco es que sea gran cosa, aunque mi groupie se espatarre como un arco iris ante ella como lo haría ante Ron Jeremy y le casque ahora un 9, ahora un 10 (según en qué cuenta mire uno), entre gemidos de placer. Será por el macizo George Maharis. Será porque vota hinchado de morapio como Ian Gillan o nadando en jaco y farlopa como el pobre Tommy Bolin. No sé. A mí no me ha parecido gran cosa. Una función correctita y en general bien llevada por el estupendo artesano John Sturges y con la siempre agradable presencia de Dana Andrews, Richard Basehart o la adorable Anne Francis, que peca de estirar y estirar el argumento hasta que, a base de mascarlo y hacer globitos, el chicle pierde sabor y acaba uno tirándolo sin pena a la papelera.

Lástima que los guionistas cobraran a tanto el kilo, porque la cosa podría acabarse más que dignamente hacia el minuto 50: un buen par de guantazos o una bala entre ceja y ceja y esos villanos plastas y desnortados, que cuando las cosas pintan bastos se limitan a ir chuleando con un frasquito letal en las manos, se iban con viento fresco a freír espárragos. Y saber que en la cocorota de Ed Asner hubo una vez algo parecido a pelo, aunque tenga su gracia, tampoco es que convierta esta peli en una obra maestra. Eso sería como comparar a Justin Bieber con Ritchie Blackmore. O a Ronnie James Dio con el enanito Cascarrabias. Por poner un par de ejemplos, claro.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Normelvis Bates
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow