Nick Park nos regala otro gran corto de animación, el último de 4 cortos geniales, a los que hay que sumar la película. Desde mi punto de vista, tiene todas las virtudes de los cortos anteriores, y además incluye una trama de cine negro con asesinatos y demás. Se mantiene intacto su sentido del humor (hay varios momentazos absolutamente geniales), se mantiene intacta la absoluta brillantez técnica de cortos anteriores (como si no se les hubieran quemado los estudios Aardman enteritos hace poco, oiga), etc.

He leído alguna crítica negativa, y la única explicación que le encuentro es que haya personas que se hayan cansado de los personajes, de sus tramas surrealistas, de los guiños a otras películas, de las historias de amor de Wallace, de los libros de "vigilancia electrónica para perros", de "Citizen Canine", de las máquinas imposibles, etc. Para mí, mantienen la frescura del primer día, y me resultan tan divertidos que siempre me quedo con ganas de más.

Divertidísimo.