Por fin, una película del 'hombre de acero' como Dios manda en estos tiempos. Sí, las dos primeras eran más que decentes, pero tienen más de 30 años, y el tiempo las ha tratado muy mal. Vistas hoy en día parecen auténticas piezas de arqueología. A partir de ahí, las otras versiones con Christopher Reeve, o aquella de Bryan Singer, son bastante prescindibles. Hacía falta un 'reborn' que le hiciera justicia al personaje, y ha llegado al fin.

Lo mejor de esta versión son, por una parte, los actores. Henry Cavill va camino de convertirse en una estrella firme y duradera, en el Hugh Jackman de esta generación. Hasta los más críticos con la cinta de Synder (que inexplicablemente los hay), destacan el papel del británico. Sin peros. Tiene el carisma, el porte, y la presencia perfecta para encarnar al kriptoniano. Así es como siempre nos lo hemos imaginado. Por otra parte, Kevin Costner está como acostumbra últimamente: sencillamente magistral. Se come la pantalla en cada escena en la que aparece. Al igual que Russell Crowe, huelga decir. Por lo que respecta a ellas, Diane Lane y Amy Adams están también a un gran nivel, y distan mucho de ser las 'mujeres florero' de otras adaptaciones. El único que me parece mejorable es Michael Shannon, excesivamente histriónico como el general Zod.

Otro aspecto destacadísimo es su estupenda banda sonora. Hans Zimmer vuelve a salirse. Una vez más. Épica hasta decir basta. Y qué decir de la ambientación y de la puesta en escena. Simplemente fabulosas. Además, los 'flashbacks' que pueblan la película, tan criticados por algunos, a mí me parecen perfectos y muy bien colocados. Consiguen que entendamos la infancia de Clark Kent con un par de pinceladas, que es de lo que se trata.

El guión no va a ganar un Oscar, no, pero pocas veces desentona y los fans de siempre están encantados con él, que no es poco. El único 'pero' que le pondría es la excesiva duración de las batallas finales, especialmente cuando crees que todo ha acabado ya... pero no. Todavía hay más. Y no hacía falta. Y también el hecho de que después de su resolución el epílogo sea excesivamente abrupto y acelerado.

Por lo demás, una estupenda película de superhéroes, y para un servidor, la mejor de las versiones jamás rodadas sobre el 'hombre de acero' y superior a 'Batman Begins', que no es poco. Y la saga no ha hecho más que empezar...