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Polonia Polonia · Terrassa
Voto de Taylor:
8
Drama Un solitario inspector de Hacienda acude cada noche al club de striptease Exótica, en las afueras de Toronto, para ver bailar a Christina, una sensual joven que se desnuda para el público masculino ante la mirada de su ex-novio, el disc-jockey del local. (FILMAFFINITY)
23 de abril de 2008
91 de 107 usuarios han encontrado esta crítica útil
Manejar los hilos de un género tan peliagudo como el dramático no debe ser tarea fácil para cualquier director corriente y moliente. De hecho, consagrados cineastas como Von Trier o nuestra Coixet han sufrido en sus propias carnes la ira desatada de las implacables plumas de FA. ¿Su pecado?. Cimentar sus dramas en pilares excesivamente petulantes, artificiosos o intelectualoides.

Todo ello enaltece y dignifica aún más, si cabe, el trabajo de Egoyan. Un director que sabe proyectar como pocos el amargo resabio de la tristeza, de la frustración, de la muerte. Y eso mismo lo consigue Egoyan con un cine sutil y elegante, a años luz de las estrategias altisonantes e impostadas de realizadores menos dotados.

Atom no pretende engañar a nadie; le basta con seducirnos sibilinamente, desplegando sus dotes de encantador de serpientes. Eric, el ‘speaker’ del ‘Exotica’ viene a ser su ‘alter ego’. Ese alguien que nos incita y nos excita musitándonos al oido una morbosa letanía. El escenario, a su vez, constituye un elemento clave en toda esta historia. El ‘Exótica’ es ese lugar, un santuario laico en el que se desnudan cuerpos y almas. Con su oficiante, su liturgia, sus sacerdotisas y sus feligreses. Un lugar donde la voz de Cohen y los contoneos de Mia Kirshner forjan una de las secuencias de mayor tensión sexual del cine de los 90.

Francis y Cristina protagonizan una especialísima relación que aún partiendo de ese ancestral pacto de satisfacción y amparo recíproco, trasciende todo razonamiento inmediato (voyeurismo, disipación, neurosis...) y demuestra como la empatía no necesita de grandes discursos ni entiende de convencionalismos preestablecidos.

Profunda, cautivadora y tremendamente sensual.
Taylor
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