No es sólo para seguidores fieles de Peter Sellers, yo mismo no sé explicar cómo he llegado aquí, pero no tiene nada que ver con ninguna filia por el protagonista de "La extraña prisión de Huntleigh". Que esté Sellers al frente de un singular equipo de ladrones que cumplen condena en la cárcel no la hace ni mejor ni peor, a mí me gustaría elogiar el conjunto de actores de la película, cada uno con sus rarezas y extravagancias, cada uno de ellos exhalando humor en cada momento. Claro que en esto de hacer reír ya se sabe, no es lo mismo que hacer llorar, toda comedia siempre tiene garantizada sus detractores en el momento de su creación. Porque ningún humor es para todos, aunque me parezca difícil, en este caso también habrá a quien no le haga gracia el arranque de "La extraña prisión de Huntleigh". Precisamente eso, su inicio, es memorable.

Después sí es cierto que padece el previsible mal de toda comedia con varias décadas de existencia, hay muchos gags que están fuera de lugar y más de cincuenta años después han perdido la energía que con seguriad tenían. Pese a ello, el guión se sustenta gracias a la concatenación de una estupidez detrás de otra, en sumar y sumar tonterías que en general, al menos a mí, han hecho que lo pasara más bien de lo que pensaba. Pocas comedias sobreviven al paso del tiempo, "La extraña prisión de Huntleigh", pese a que haya sido valorada por menos de un centenar de usuarios, es un caso de película recomenable cien por cien. Peter Sellers al margen, todos brillan.