Haz click aquí para copiar la URL
España España · Córdoba
Voto de i42poloj:
2
Terror “El hombre más pálido. El traje más oscuro. Más grande que el gigante más alto. Ten miedo de este hombre: Slender Man ya que puede hacer lo que nadie puede”. Estas son algunas de las características que usuarios del internet dieron al personaje ficticio de terror Slender Man (el hombre delgado). Ahora la criatura llega a la gran pantalla con este film de terror, que nace de una de las leyendas urbanas de la web más populares, en base de ... [+]
24 de octubre de 2018
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Buenas noches, y bienvenidos a la nave del misterio.
En el programa de hoy analizaremos el viral “Creepypasta” (¿quién inventó este término, Chicote?) del hombre alargado, cuya sombra se cierne sobre aquellos que sean tan estúpidos como las chicas de este bodrio, para atormentarlos con pesadillas dignas de un David Lynch fumado.
Lo cierto y verdad es que una cosa tan denigrante como esta no debería existir, pues es terrorífica pero por lo mala. Con la chica de “7 deseos” (¡vaya carrera cinematográfica que lleva Joey King!) y un puñado de amigas que son conocidas en su casa a la hora de comer, nos encontramos con un guion plano, zafio, burdo y que no se sostiene.
No ahonda en los orígenes de esta criatura, ni en la supuesta leyenda ni en lo que de verdad se ha propagado por internet. En lugar de eso, es una sucesión de espantosas escenas (y no por el espanto que provocan) que usan mucho los sueños paranoicos y las rayadas mentales. Eso sí, las redes sociales y las escenas de instituto que no falten, no vaya a ser que se nos aburra el único público al que le puede gustar esto.
Da menos miedo que los informativos de la hora del almuerzo. No solo casi siempre vemos venir al larguirucho este antes de que se acerque a sus víctimas, sino que nunca le distinguimos bien del todo ni de lejos ni de cerca, con lo cual no asusta ni por insinuación sutil ni por sobresalto. Este film solo puedo inquietar a niños menores de 12 años con escasa “mochila” cinéfila.
La iluminación es otro punto a tocar. En el pueblo ese, parece que el Ayuntamiento tiene problemas para pagar a la compañía eléctrica, pero es que en las casas pasa igual. Se han dejado poco presupuesto en bombillas. O eso, o el proyector de la sala donde la he visto está trucado para aumentar su durabilidad minimizando la luminosidad, como hacen en algunos cines según he escuchado en el programa de radio “La claqueta” de Pepe Nieves. Sea como sea, no se ve un pimiento. Pero me temo que esto solo sirve para tapar la falta de presupuesto de este subproducto.
Para poner la guinda del pastel, no sé qué es más estúpido, si los diálogos o las escenas. Lo de la negra en el bosque es de juzgado de guardia. ¿Para qué se quita la venda la idiota? O lo de la biblioteca, que con ese fractal de libros me hizo pensar en lo siguiente: “¿Por qué no estoy viendo “Interstellar” en vez de esto?”. ¿Y qué decir de ese momento en el que en vez de "Slender man", parece "Spider-man" con las patas de araña esas con las que salió en “Infinity war”? Es tan lamentable que llega a dar hasta pena.
A eso le añado (por si no fuera ya bastante) que cuando la he visto he tenido la desgracia de estar en una sala llena de insufribles adolescentes de los que no se callan ni debajo del agua y como les pagan la entrada se creen que pueden dar voces y decir estupideces como si estuvieran en su casa, inspirándome pensamientos homicidas relacionados con seguetas oxidadas y lenguas sujetas con tenazas como con Imhotep en “La momia”. ¡Señor, dame paciencia!
Todo esto sumado supone que ver “Slender man” haya sido una experiencia penosa (y que por cierto se hace bastante larga siendo bien corta), que no se la deseo ni a mi peor enemigo. Si lo llego a saber me quedo en mi casa durmiendo, algo bastante más productivo que sufrir semejante engendro.
i42poloj
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow