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España España · Palma (Mallorca)
Voto de Miquel:
9
Drama En 1941, Barton Fink viaja a Hollywood para escribir un guión sobre el luchador Wallace Berry. Una vez instalado en el Hotel Earle, el guionista sufre un agudo bloqueo mental. Su vecino de habitación, un jovial vendedor de seguros, trata de ayudarlo, pero una serie de circunstancias adversas hacen que se sienta cada vez más incapaz de afrontar su trabajo. (FILMAFFINITY)
2 de julio de 2006
311 de 360 usuarios han encontrado esta crítica útil
Film independiente, cuarto de los hermanos Coen. Se rodó en los estudios Culver, City Hall y LA (California), con un presupuesto de 9 M dólares. Nominado a 3 Oscar, ganó en Cannes 3 premios (Palma de oro, director y actor).

La acción tiene lugar en NYC y en LA, en 1941, época dorada del cine americano. Narra la historia de Barton Fink (John Turturro), autor teatral de cierto éxito en Broadway, reclamado como guionista de películas B por un estudio de Hollywood. Empeñado en escribir obras que reflejen el alma del ciudadano medio, recibe el encargo de elaborar un guión sobre la vida del púgil de lucha libre Wallace Berry. Alojado en una habitación del hotel Earle, viejo y sombrío, cae en un estado de colapso creativo que le sume en la postración y desmoralización. A esto se añaden ruídos extraños, las visitas intempestivas del huésped de la habitación contigua, Charlie Meadows (John Goodman), la falta de apoyo del realizador Ben Geisler (Tony Shalhoub), los desoladores consejos del veterano guionista W.P. Mayhew (John Mahoney), la retórica hueca del presidente de Capitol Pictures, Jack Lipnick (Michael Lerner) y la visita de dos agentes de policía que investigan los crímenes de Karl Mundt, "Mundt el loco".

La película parodia el mundo de Hollywood, poblado de directivos fatuos e incompetentes; realizadores sin ideas; muchos más guionistas de los necesarios; el alcoholismo como respueta a la frustración; la búsqueda obsesiva del éxito de público; la reiteración de temas y argumentos tópicos. En un nivel más profundo se explica el papel del buen guionista ("que trabaja con dolor, sacando a la superficie verdades ocultas de la vida"). En un tercer nivel se critica con sorna el antisemitismo, el militarismo, la fuerza bruta, las burlas del trabajo intelectual, la violencia doméstica. Mediante símbolos se explica el desmoronamiento interior de Barton (papel de la pared, cola derretida), el coito de Barton y Audrey (lavamanos), el alcoholismo a la romana (urinario), las masturbaciones de Barton (manchas del muro), la mente en blanco de Barton (gafas sobre almohada) y la presencia de la locura asesina (incendio dantesco). Destacan los ambientes sórdidos y opresivos, reforzados con la presencia de elementos perturbadores, como el vuelo invisible del mosquito, mosquitos necrófilos, paquetes misteriosos, llamas que no consumen lo que queman, timbres de sonido interminable.

La música ofrece composiciones sutiles y pausadas, con abundantes solos, que evocan sentimientos del protagonista. La fotografía se apoya en encuadres muy cuidados, movimientos de cámara sorprendentes, planos picados y "travellings" cenitales, preferencia por la geometría y por los marrones, grises y dorados. El guión contiene diálogos de dobles y triples intenciones, con toques de humor negro y macabro. La interpretación de Turturro, premiada en Cannes, es excelente y es brillante la de Goodman.

Densa y compleja, es una de las obras más reconocidas y estimadas de los Coen.
Miquel
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