Haz click aquí para copiar la URL
Voto de José (FullPush):
9
Cine negro. Thriller. Intriga. Drama En un momento crucial de su vida financiera, Gondo (Toshirô Mifune), un directivo de una importante empresa de zapatos, recibe la noticia de que su hijo ha sido secuestrado. El rescate exigido es una gran cantidad de dinero, pero Gondo la necesita para cerrar una negociación que le dará el control de la empresa. (FILMAFFINITY)
3 de octubre de 2011
11 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Por si algún lector no compartiera según qué teorías acerca de la in/existencia de un Más Allá celestial, lo que sí diré, o señalaré, es lo incuestionable de que su apéndice negativo años ha que se encuentra entre nosotros. Obviamente no me estoy refiriendo a ninguna especie de lugar de pesadilla donde el fuego adquiere un papel protagonista y allá donde uno mire encuentra almas en pena hirviendo en gigantescas cacerolas; me estoy refiriendo, claro, a algo mucho más sutil pero igualmente devastador, no apreciable quizás a simple vista, pero que, a poco que uno escarbe, se presenta perfectamente nítido y mortalmente peligroso: hablo, concretamente, de esos demonios interiores que todos llevamos donde quiera que viajemos, de forma más o menos consciente, qué importa, y que siempre encuentran cómo manifestarse con no muy agradables resultados. Es aquí donde entra la moral, el autodominio y la madurez de cada uno, donde se demuestra, en fin, de qué tipo de pasta estamos hechos y hasta qué punto somos capaces de tensarla sin llegar a destruirnos... tarea esta de lo más difícil. Sobrevivir y sobrevivirse, que se llama.

Kurosawa, con su película, no sólo dibuja un retrato inapelable y jodidamente amargo en torno a esa tara tan humana que es el odio, la envidia y lo común del sinsentido cuando toca hablar de ellos (¿buscan razones? lo más probable, y lo más real, es que no las haya); también se encarga, ya en la dirección, de que el resultado llevado a la pantalla sea lo más fidedigno posible en comparación con lo que cada uno ha visto y ve, si se empeña, cada puto día vaya adonde vaya -el Odio nos consume-. Así, yo también dividiría la cinta, como creo alguna gente ha hecho, en tres apartados: un inicio sobrecogedor, tenso de cojones y tremendamente ambiguo; una investigación policial de manual, en que no sobra ni falta absolutamente nada (aquí el único truco es la ausencia de él; rarísimo tratándose de un thriller); y una extensa parte final que es, de veras, una puta maravilla, no sólo por la atmósfera que consigue crear, sórdida, espeluznante, con una fotografía bestial, sino por las implicaciones de las que hablábamos hará unas cuantas líneas ...

No hace falta acudir a mundos aún desconocidos por los vivos para definir el Infierno, basta con mirar dentro de uno mismo y escandalizarse de hasta qué punto estábamos podridos. El director lo sabe bien, en tanto en cuanto quizá sus demonios sean, al fin y al cabo, los tuyos, los del tal secuestrador o, por qué no, también los míos.
José (FullPush)
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow