La película literalmente ofrece poco y nada, es una oferta comercial más, a la que solo debe hay que reconocerle su honestidad, por que desde el primer momento sabes lo que vas a ver.
Una mujer cosmopolita de clase media alta, tiene que ir a una boda, como no tiene novio decide llevar un acompañante pago, el resto de conflictos están mil veces vistos, y la verdad que ver una situación que intenta ser cómica pero que es una copia a otra ya vista, es como encontrarle gracia a un chiste ya oído, todos los personajes son intercambiables con cientos de otras películas, igual el desarrollo de la historia, la forma en que sus protagonistas se van ¿enamorando?, cuando en realidad el par de actores que los interpretan no tiene la más mínima química entre si, y se ven acartonados en sus respectivos papeles.
En fin solo ver si son adictas o adictos a la comedia romántica, o si no tienen nada que hacer, la encuentran en la tele y se quedaron sin Internet.