La película es entretenida y hasta ahí. Si te gustan la acción bélica, bien. Pero tendrás que tener en cuenta los documentos desclasificados en noviembre de 1968 por el Alto Mando Aliado. En ellos se afirma que:

Los alemanes se creían todo.
Las balas de los alemanes eran hinchas de los aliados y se desviaban antes de impactar contra ellos.
Los aliados podían devolver granadas de mano a los alemanes antes que estallaran.
Los alemanes ya no podían volver a remitirlas.
Clint Eastwood llevaba el bolsillo de Doraemon del cual sacaba cuerdas y bombas continuamente.
Clint Eastwood siempre tenía un arma lista para matar alemanes.
Richard Burton podía hablar con alemanes de alta graduación con guiñar un ojo.
Los comandos aliados abrían y cerraban puertas a capricho.
Los comandos aliados paseaban por los cuarteles enemigos como Pedro por su casa.
Los comandos aliados contaban con la simpatía de las dos únicas mujeres rubias de buen ver en toda la IIGM.
Los mandos de la Gestapo se jodían y sólo podían hacer de pagafantas.
Los comandos aliados si se subían a lo alto de un teleférico, adquirían el don de la invisibilidad.
Los comandos aliados disponían de todos los vehículos aparcados.
Los comandos aliados eran gavilanes y los alemanes, palomas.