Me lo estoy viendo: dentro de unos años esta película se va a convertir en auténtico material de culto, si no lo es ya. A pesar de haber tenido una presencia prácticamente nula en cines, el boca-oreja ha funcionado estupendamente en el mercado doméstico, se la reivindica con ímpetu en cantidad de webs, y si no andan jodiendo la marrana con secuelas, esta pequeña joyita verá aumentada su nota aquí con el paso de los años.

Planteada como una suerte de experimento auto-referencial y homenaje a todo un género cinematográfico, 'Detrás de la máscara' desconcierta desde su sinopsis, y lo hace aún más cuando uno se dispone a enfrentarse a ella, habiendo transcurrido unos minutos de metraje. El debut del tal Glosserman maneja sin lugar a dudas un planteamiento arriesgado, friki a base de bien, y dudo bastante que pueda ser disfrutado (o al menos no totalmente) por aquellos que no estén familiarizados con las reglas y los tics habituales del Slasher. Pero, igualmente, dudo también que todo aquel que se haya tragado todas las entregas de 'Viernes 13', 'Pesadilla en Elm Street', 'Halloween', y una larga lista de etcéteras, no goce con esta auténtica declaración de amor y devoción a este tipo de películas: el homenaje definitivo a todo un género.

Todo está aquí: la superviviente o chica final, la némesis del asesino, las potenciales víctimas (a saber: el guaperas, el colgao, la zorrilla...y como no, la virgen), las persecuciones en la que el asesino inexplicablemente alcanza a las víctimas a pesar de ir a paso de tortuga, las luces que se apagan, las armas que fallan, la historia negra que alimenta la leyenda del psichokiller, etc,...pero todo tratado, esta vez, desde el punto de vista del asesino. Un asesino encantador y simpatiquísimo, que nos explicará con toda la naturalidad del mundo los pasos que va a seguir para hacer su debut en el mundo de los asesinos en serie carismáticos (y es que, genial detalle, resulta que en el mundo que nos propone la película; Freddy Krueger, Michael Myers, Leatherface, Jason Voorhes...existen de verdad). Así, explicará a un equipo de reporteros, y a la vez a nosotros, eso que tantas veces hemos querido saber: ¿como se lo montan los psychokillers para desempeñar con tanta eficacia su labor? (o su "oficio", como dicen aquí).

La cantidad de detalles, guiños, referencias y homenajes es interminable en la primera hora de la película, con diferencia la mejor parte del asunto, pues la última media hora, prescinde del estilo tipo cámara en mano para convertirse en un slasher más, y de los malotes. Lo cual por otra parte tampoco debería suponer un inconveniente cuando el espectador ya ha entrado por completo en el juego, y sabe perfectamente que esto no hay que tomárselo muy en serio. Lo que si se podrían haber currado un poquito más, es cierto giro argumental que se antoja demasiado previsible.
(Paso a spoiler sin ningún tipo de spoiler).