Una aventura donde de fondo tenemos un estudio científico atrayente desde el aspecto psicológico: el miedo como respuesta instintiva frente a un estímulo que el ser humano no puede dominar. En este tópico me gustó como la película está apoyada en una desarrollo intrigante y sin descuidar el aspecto emotivo. No se recurre al golpe bajo de asustar con fórmulas ya presentadas muchas veces. Al fin y al cabo, tampoco creo que el objetivo del filme pase por brindar al espectador un rato de zozobra y nada más. Lo pienso como una análisis de la conducta humana frente a determinados estímulos ambientales que provocan y desencadenan el pánico.
Por otro lado una historia con un toque de agobio, situaciones donde hay factores sobrenaturales que se desarrollan en forma idónea para hacer del argumento un elemento convincente dentro de lo que el género permite. Las licencias conceptuales que la película se toma sirven para aumentar la intensidad de las emociones en el filme. Hay ideas fuertes como la liberación de ánimas explotadas y que sufren un cautiverio, espectros que subyugan, fuertes lazos familiares que conectan una realidad con otra dimensión, personas que son la clave para desenmarañar y dar justicia a la situación.
No puedo dejar de reconocer que el cine fantástico bien hecho es una debilidad mía, y quizás le otorgue demasiado méritos que son un cúmulo de factores muy subjetivos y que en la objetividad la película no signifique nada para otros espectadores.
No obstante, son muy cuidadoso y exigente con este tipo de películas y en realidad que luego del tercer visionado que tengo de la misma, puedo concluir que le encuentro demasiados méritos como para justificar la calificación numérica que asigno.
Esa nota es justificada por un guión conciso y efectivo, simple y sin demasiadas vueltas, pero que cautiva la atención. No me pareció ridículo en ningún momento y las variantes que se presentan me parecieron idóneas.
La ambientación y los escenarios góticos dados son otro factor que me atrae visualmente, sin lugar a dudas que la película estéticamente es un joya. Ya sea desde los efectos especiales, muy bien logrados, el diseño de arte con un estilo bien surrealista, con buenos juegos de cámaras. La forma en que está filmada es original, hay variedad de recursos que hablan a las claras de una fotografía y una imagen muy bien conseguida. Y sin lugar a dudas que la música es un elemento coadyuvante para dar como resultado un producto fílmico auténtico, que se apoya en un buen argumento y que todas las situaciones fantasiosas que se generan son necesarias y en ningún momento se recurre al exceso de algún elemento para recurrir al facilismo.