El ser humano es capaz de lo peor y muchas más veces de lo mejor, de eso no hay la menor duda y con solo ver historias como la que nos cuenta The Dawn Wall queda claro.
Un año antes de la oscarizada Free Solo, nos aferrábamos a El capitán, una enorme roca de más de 900 metros de altura enclavada en el Yosemite Park de California, la meca de los escaladores, una roca de granito casi imposible de escalar y el gran desafío que nos presentan en este increíble documental.
Yo lo he visto después de Free Solo, casi de casualidad y he de decir que me ha gustado mucho más, sin desmerecer por supuesto la MEGA hazaña de Alex Honnold de escalar en modo solo integral una de las caras de El Capitán, es decir sin ningún tipo de seguridad, ni cuerdas ni mierdas que te salven la vida, una ascensión perfecta con la sólo ayuda de tu propia concentración y las puntas de las yemas de tus dedos. Alex Honnold es una leyenda y el vértigo que uno siente al verle “agarrado”a una fría roca sin ninguna protección es brutal, alucinante, pero creo que los protagonistas de The Dawn Wall, haciendo también una auténtica proeza, en una modalidad totalmente diferente a la de Honnold, en mi opinión acaban transmitiendo más, mucho más. Desde el minuto uno, consigue mantenerte enganchado a la historia e incluso hay un par de momentos completamente épicos que te hacen emocionarte casi tanto como los dos escaladores protagonistas.
Este documental se complementa a la perfección con Free Solo, es un tándem perfecto para novatos.

Después del chasco al ver el biopic sobre el vicepresidente Cheney, me aburrió tanto que la dejé a la hora de metraje, he podido relamerme con lo nuevo del griego Yorgos Lanthimos, The Favourite, cuarto largometraje enteramente en inglés del autor de Langosta o Canino.

Esta joyita de 120 minutos de duración es una delicia turca, barroca sin caer en excesos, mordaz, inquietante a veces, hermosamente grotesca y en definitiva quizás la más “accesible” cinta de este director que en mi opinión es de los pocos autores que crean historias, cuentos, fábulas de manera magistral y con un marcado sentido tragicómico.

A mi Lanthimos me gusta bastante, tiene su propio sello y cada vez que me siento a ver algo de su autoría me quedo siempre pensativo y con una sonrisilla pícara en mi rostro. Es un autor por el que merece la pena ir al cine aunque no toda su obra es perfecta, eso sí.

Normalmente es un autor que crea sus propias historias en estrecha colaboración con el guionista también griego Efthimis Filippou, pero en esta ocasión toma un guión ya escrito y gestado varios años antes por otros dos guionistas y lo lleva a su terreno, imprimiéndole su lenguaje, con otro ritmo, más cálido y en otro espacio temporal. Aún así se respira Lanthimos desde el principio hasta el final de la peli, planos cortos y cerrados, un macabro sentido del humor y un finísimo sentido del montaje que hace de La Favorita un drama histórico que deambula entre la más pura comedia y la más hermosa crueldad.

Para el director griego no es lo más importante hacer una crónica histórica, sino un drama, como ya mencionamos antes,de personajes donde los hechos verídicos, históricos que ocurrieron a su alrededor sirven tan solo como marco emocional, como un contexto más que creíble para el desarrollo de las protagonistas. El contexto histórico es siempre mostrado a partir de la mirada de ellas. Es como esas fotos retratos donde nuestra cara queda iluminada y el fondo difuminado.
La Favorita es un drama de personajes solitarios en estancias muy amplias, el uso del “ojo de pez” por ejemplo, además de ser muy raro en el cine histórico, consigue eso mismo, que los espacios queden distorsionados, el contraste de las salas iluminadas con luz natural contraponiéndose con pasillos a oscuras e iluminados con velas ayuda a crear ese ambiente viciado que se respira en toda la película.

Las interpretaciónes son mayúsculas y Olivia Colman está sublime, es curioso como está actriz se ha hecho un nombre como actriz de carácter al saber moverse entre personajes que oscilan entre la comedia y el drama.
Stone y Weitz están de dulce también en sus respectivos papeles.

En resumen, La Favorita es en mi humilde opinión la mejor y más accesible película de Lanthimos, con un humor grotesco a veces, finísimo en otras, con una trío de actrices sublimes y que conseguirá mantenerte con una mueca constante en tu butaca.

Netflix nos vuelve a sorprender con una “serie” diferente, extraña, sorpresiva y como además las cuelgan al completo te puedes dar un atracón sin ningún tipo de remordimiento.
Love Death + Robots es un perfecto catálogo de cine de animación, 18 capítulos tan diferentes entre sí como el arte que nos presenta, modelado 3D mezclado con acción real, animación clásica, foto realidad o estética de videojuegos forman parte de esta antología de animación que como he dicho antes es sorprendente pero que se queda al final en tierra de nadie debido a los flojos guiones de algunos de los cortos.
Empieza de manera brutal pero se va diluyendo poco a poco aunque la factura artística no decae en ningún momento, regalándonos auténticas joyas animadas, descarnadas, violentas y a veces un tanto repulsivas pero hechas de manera hermosa. Extraña paradoja verdad? Una mezcla de la estética de Bladerunner, Apocalipsis Now y Kill Bill.
Es una gozada ver piezas de ciencia ficción, terror y humor en un mismo conjunto, abarcando temas que oscilan entre lo onírico, lo absurdo y lo filosófico.
La serie viene apadrinada por Fincher (Seven) y Miller (Deapool) y en sus 185 minutos no te dejará indiferente. Otra apuesta de Netflix que le sale bien, eso si LD+R te dejara un regusto agridulce al final de su visionado pero hay que verla sí o sí.
Si me tuviera que quedar con un solo capítulo, complicada tarea, me quedaría con uno de los más simples pero con la animación más bella de todos, en mi opinión, y que te hace pensar y sonreír a partes iguales, Three robots, delicioso.

Kong, Skull island tiene de todo, acción trepidante desde prácticamente el principio de la cinta, unos actores famosos y bien actuados, sin grandes alardes pero con carisma, una banda sonora bestial: The Stooges, la Creedence, David Bowie, una fotografía guapísima, lazos constantes con Verne o Stevenson y una mezcolanza de guiños a películas bélicas tipo Apocalipsis Now o La chaqueta metálica. Además por supuesto de unos efectos especiales y visuales acordes a los tiempos que corren.

Dos horas donde en ningún momento la acción decrece y reúne todas las características de ese tipo de cine comercial pero bien hecho que a veces buscamos.

Entretenida 100%.

Menuda sorpresa la nueva peli de Waititi, gran película, sí señor. Aún estoy sorprendido que sea de Disney, bueno de Fox antes de la compra y más sorprendido porque este director no me hace especial gracia. A partir de ahora iré a su cine sin remilgos porque de verdad que esta peli es una auténtica delicia.
Además de un reparto bien dirigido, una escenografía cuidada al detalle o un gran trabajo de producción, Jojo Rabbit es un regalo, amargo en su interior pero envuelto en papel de celofán. Esta llena de detalles y tiene unos diálogos extraordinarios.
El peso de la cinta lo leva un niño, y de qué manera, el joven Roman Griffin Davis, muy bien acompañado siempre, lo hace de forma magistral y la historia que nos cuenta está llena de matices, de tristeza y alegría.
Para acabar este 2019 no está nada mal, junto con El Faro de Eggers , lo más interesante sin duda alguna.