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Críticas de Toshiro Eastwood
23 de febrero de 2011
12 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
China vs Japón
Segunda cinta, según creo, en la filmografía de los hermanos Liu, que tengo el honor de ser el primero en puntuar y criticar.
Dentro de la línea del cine hongkonés de los años 70, de temática habitual de exaltación de la cultura china frente a la occidental o la japonesa (en este caso la japonesa), con un argumento simple y un guión no muy allá, Liu Chia-Lang realiza otra película sobre Kung Fu repleta de combates, honor, y una pizca de comedia con la originalidad de profundizar en las artes marciales japonesas mucho más allá que la mayoría de films de Kung Fu de la época. Protagonizada por su hermano Gordon Liu que, una vez más, satisface a sus seguidores de sobra aunque esta vez con una horrible peluca (porque Gordon Liu siempre ha sido calvo, ¿no?).
Aunque no se trate de una producción virtuosa en su guión, dirección o interpretación, llegando incluso a decaer en algún punto, sí es una cinta muy interesante por la comentada profundización en las artes marciales japonesas, disfrutando durante el largometraje de muchos combates con varios estilos y armas diferentes pertenecientes a las culturas china y japonesa, si bien es cierto, desde un enfoque poco neutral. Además, quizá más de un practicante se sienta ofendido ya sea por el lugar en el que queda su arte marcial, o por la no del todo fiel representación de la misma.
En el spoiler dejo un resumen de los combates contra los maestros japoneses con los estilos y armas utilizados (cualquier parecido con la wikipedia es mera coincidencia…) así como un comentario sobre el argumento.
Segunda cinta, según creo, en la filmografía de los hermanos Liu, que tengo el honor de ser el primero en puntuar y criticar.
Dentro de la línea del cine hongkonés de los años 70, de temática habitual de exaltación de la cultura china frente a la occidental o la japonesa (en este caso la japonesa), con un argumento simple y un guión no muy allá, Liu Chia-Lang realiza otra película sobre Kung Fu repleta de combates, honor, y una pizca de comedia con la originalidad de profundizar en las artes marciales japonesas mucho más allá que la mayoría de films de Kung Fu de la época. Protagonizada por su hermano Gordon Liu que, una vez más, satisface a sus seguidores de sobra aunque esta vez con una horrible peluca (porque Gordon Liu siempre ha sido calvo, ¿no?).
Aunque no se trate de una producción virtuosa en su guión, dirección o interpretación, llegando incluso a decaer en algún punto, sí es una cinta muy interesante por la comentada profundización en las artes marciales japonesas, disfrutando durante el largometraje de muchos combates con varios estilos y armas diferentes pertenecientes a las culturas china y japonesa, si bien es cierto, desde un enfoque poco neutral. Además, quizá más de un practicante se sienta ofendido ya sea por el lugar en el que queda su arte marcial, o por la no del todo fiel representación de la misma.
En el spoiler dejo un resumen de los combates contra los maestros japoneses con los estilos y armas utilizados (cualquier parecido con la wikipedia es mera coincidencia…) así como un comentario sobre el argumento.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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20 de septiembre de 2010
16 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Serie continuación de "Ghost in the shell: stand alone complex", continúa el hilo dejado en ésta, atando los cabos sueltos dejados al final de la anterior en los primeros capítulos, para así continuar con el mismo juego de episodios "stand alone" y "complex" de la primera, pero esta vez con el nombre de "dividual episode" e "individual episode".
Me explico, para los que no disfrutaron de la anterior. Los "dividual episode" son capítulos cuyo argumento empieza y acaba en el mismo episodio, mientras que los "individual episode" hilvanan la trama de la serie, en este caso la de los "once individuales".
La trama de los once individuales arranca de un tema muy similar al del "hombre que ríe" de la primera temporada, para después ir complicándola y profundizando en ella, logrando distanciarse de la anterior.
No obstante, esta serie puede verse sin problemas sin haber disfrutado de la primera temporada, perdiendo tan sólo ciertas citas a la trama anterior. A pesar de ello, no deja de ser recomendable ver la primera, para así saber algo sobre el "complejo de autosuficiencia", y el tan nombrado “hombre que ríe”.
Personalmente, me pregunto por qué se le trata como serie independiente a la primera, cuando parece claramente, en todos los aspectos, una segunda temporada. Así que a los que les gustase la anterior, disfrutarán igualmente de ésta, y lo contrario puede decirse para quienes no les gusto, ya que la dinámica seguida es la misma.
Como principal (y casi única) virtud respecto a la anterior, el apartado gráfico parece haber mejorado. También me pareció interesante que dedicasen un par de capítulos a profundizar en los secundarios Path y Saito, aunque ya puestos podrían haber hecho uno también de Bouma.
Como principal defecto, podría señalarse que en determinados momentos, tratando de buscar la profundidad de la anterior (o de las películas), alcanzan una complejidad innecesaria (y además, los tachikomas siguen existiendo, aghhh, como odio a esos tachikomas…).
En definitiva, estando por debajo de la primera película y manteniendo el nivel de la primera temporada, una magnifica serie para los amantes de Ghost in the shell.
Un par de detalles sobre la trama en el spoiler.
Me explico, para los que no disfrutaron de la anterior. Los "dividual episode" son capítulos cuyo argumento empieza y acaba en el mismo episodio, mientras que los "individual episode" hilvanan la trama de la serie, en este caso la de los "once individuales".
La trama de los once individuales arranca de un tema muy similar al del "hombre que ríe" de la primera temporada, para después ir complicándola y profundizando en ella, logrando distanciarse de la anterior.
No obstante, esta serie puede verse sin problemas sin haber disfrutado de la primera temporada, perdiendo tan sólo ciertas citas a la trama anterior. A pesar de ello, no deja de ser recomendable ver la primera, para así saber algo sobre el "complejo de autosuficiencia", y el tan nombrado “hombre que ríe”.
Personalmente, me pregunto por qué se le trata como serie independiente a la primera, cuando parece claramente, en todos los aspectos, una segunda temporada. Así que a los que les gustase la anterior, disfrutarán igualmente de ésta, y lo contrario puede decirse para quienes no les gusto, ya que la dinámica seguida es la misma.
Como principal (y casi única) virtud respecto a la anterior, el apartado gráfico parece haber mejorado. También me pareció interesante que dedicasen un par de capítulos a profundizar en los secundarios Path y Saito, aunque ya puestos podrían haber hecho uno también de Bouma.
Como principal defecto, podría señalarse que en determinados momentos, tratando de buscar la profundidad de la anterior (o de las películas), alcanzan una complejidad innecesaria (y además, los tachikomas siguen existiendo, aghhh, como odio a esos tachikomas…).
En definitiva, estando por debajo de la primera película y manteniendo el nivel de la primera temporada, una magnifica serie para los amantes de Ghost in the shell.
Un par de detalles sobre la trama en el spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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Pobres criaturas
2 de enero de 2012
9 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Film hongkonés de temática mafiosa con la inmigración de telón de fondo, muy en la línea, tanto en dirección como en guión, de películas como “Election”.
Parte de un argumento necesario en cuanto a su planteamiento de la inmigración china en Japón, así como de otras tantas nacionalidades, mostrándonos de forma clara y objetiva el contexto en el que los inmigrantes llegan e intentan ganarse la vida, tendiendo en muchos casos a meterse en el mundo de lo ilegal y las bandas como “atajo”, como decía Hong Kong boy en la cinta.
Y esto lo hace Derek Yee a través de un guión inteligente, serio y sobrio, aunque con un montaje abrupto, y por momentos artificioso. El ritmo del film va dando saltos entre demasiado rápido y hacerse de rogar. Además, determinadas elipsis narrativas y flashbacks cantean un poco a chapucilla.
La dirección y fotografía aceptable, sin altivajos, salvo un par de usos de cámaras que no vienen demasiado a cuento.
Pero desde luego la gran sorpresa de la cinta es un Jackie Chan completamente fuera de su campo, y sin embargo saliendo más que airoso. Si bien es cierto que, ya sea por el papel o por si mismo, no destaca en cuanto a interpretación, mostrándonos un personaje bastante “estático”, no nos defrauda en ningún momento. Cumple su papel con creces y, hasta donde llego a conocer de su carrera, debe ser uno de sus papeles más realistas y mejor construidos. Y todo ello, para sorpresa del respetable, sin una sola escena de artes marciales (sin bien es cierto que navajazos, leches varias y violencia en general salpican la cinta).
Que no se asusten los fans de Jackie Chan por la falta de artes marciales, es una película muy recomendable para disfrutar de un Jackie dando lo mejor de si mismo y demostrando que sabe salir de su campo.
A los que habitualmente rechazan las cintas de nuestro héroe, también se la aconsejo, principalmente por lo correcto, interesante e intenso de la película, pero también para que disfruten una nueva versión de Jackie que les haga verle de otro modo.
Parte de un argumento necesario en cuanto a su planteamiento de la inmigración china en Japón, así como de otras tantas nacionalidades, mostrándonos de forma clara y objetiva el contexto en el que los inmigrantes llegan e intentan ganarse la vida, tendiendo en muchos casos a meterse en el mundo de lo ilegal y las bandas como “atajo”, como decía Hong Kong boy en la cinta.
Y esto lo hace Derek Yee a través de un guión inteligente, serio y sobrio, aunque con un montaje abrupto, y por momentos artificioso. El ritmo del film va dando saltos entre demasiado rápido y hacerse de rogar. Además, determinadas elipsis narrativas y flashbacks cantean un poco a chapucilla.
La dirección y fotografía aceptable, sin altivajos, salvo un par de usos de cámaras que no vienen demasiado a cuento.
Pero desde luego la gran sorpresa de la cinta es un Jackie Chan completamente fuera de su campo, y sin embargo saliendo más que airoso. Si bien es cierto que, ya sea por el papel o por si mismo, no destaca en cuanto a interpretación, mostrándonos un personaje bastante “estático”, no nos defrauda en ningún momento. Cumple su papel con creces y, hasta donde llego a conocer de su carrera, debe ser uno de sus papeles más realistas y mejor construidos. Y todo ello, para sorpresa del respetable, sin una sola escena de artes marciales (sin bien es cierto que navajazos, leches varias y violencia en general salpican la cinta).
Que no se asusten los fans de Jackie Chan por la falta de artes marciales, es una película muy recomendable para disfrutar de un Jackie dando lo mejor de si mismo y demostrando que sabe salir de su campo.
A los que habitualmente rechazan las cintas de nuestro héroe, también se la aconsejo, principalmente por lo correcto, interesante e intenso de la película, pero también para que disfruten una nueva versión de Jackie que les haga verle de otro modo.
19 de enero de 2011
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con “Oldboy” conocí el cine surcoreano. Con “Hierro 3” repetí, y “Memories of a murder” acabo de convencerme.
Era un cine que cubría todas mis necesidades. Calidad técnica, artística y demás cosas gafapastas. Violencia, venganzas, y demás cosas viriles. Cosas orientales, y… y demás cosas frikis.
Park Chan-wook, Kim Ki-duk, Bong Joon-ho, Kim Ji-woon... Pronto el amor ingenuo e inocente se convirtió en una obsesión. Necesitaba más. Y lo tuve.
Pero llegué demasiado lejos. La avaricia me pudo. Quería tanto, que no fui capaz de controlarme, cualquier cosa valía. Y ese fue mi error.
“!Oh!!“Bichunmoo”!¡Otra coreana, qué bien!” Pensaba yo, inocente de mí.
Que bajón para mi idealizada Corea del Sur.
Era un cine que cubría todas mis necesidades. Calidad técnica, artística y demás cosas gafapastas. Violencia, venganzas, y demás cosas viriles. Cosas orientales, y… y demás cosas frikis.
Park Chan-wook, Kim Ki-duk, Bong Joon-ho, Kim Ji-woon... Pronto el amor ingenuo e inocente se convirtió en una obsesión. Necesitaba más. Y lo tuve.
Pero llegué demasiado lejos. La avaricia me pudo. Quería tanto, que no fui capaz de controlarme, cualquier cosa valía. Y ese fue mi error.
“!Oh!!“Bichunmoo”!¡Otra coreana, qué bien!” Pensaba yo, inocente de mí.
Que bajón para mi idealizada Corea del Sur.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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24 de agosto de 2011
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película de artes marciales de un joven Jet Li en sus inicios. El argumento, simple como en tantas otras, trata de la venganza de un estudiante de Shaolin contra un mandamás del gobierno.
A destacar el papel fuera de lo común en la filmografía de Jet Li, mucho más cómico, cercano al papel introducido en el cine oriental por Jackie Chan.
Las escenas de artes marciales están bastante bien realizadas, aunque hay que tener en cuenta que ya estamos en la década de los 80, y mucho ha mejorado la industria del cine en Hong Kong. De hecho, comparada, por ejemplo, con las coreografías de “Proyect A” y su secuela, incluso quedaría coja.
Los exteriores gozan de unos decorados/paisajes bastante bonitos (la Ciudad Prohibida, los grandes valles o el templo Shaolin), pero a cambio, se nota cierto defecto óptico que distorsiona algunas tomas, quizá por la calidad del equipo de grabación.
Un ritmo narrativo muy dinámico, su escasa duración y falta de pretensiones hacen de ella una cinta más que disfrutable aun sin ser una obra mayor.
A destacar el papel fuera de lo común en la filmografía de Jet Li, mucho más cómico, cercano al papel introducido en el cine oriental por Jackie Chan.
Las escenas de artes marciales están bastante bien realizadas, aunque hay que tener en cuenta que ya estamos en la década de los 80, y mucho ha mejorado la industria del cine en Hong Kong. De hecho, comparada, por ejemplo, con las coreografías de “Proyect A” y su secuela, incluso quedaría coja.
Los exteriores gozan de unos decorados/paisajes bastante bonitos (la Ciudad Prohibida, los grandes valles o el templo Shaolin), pero a cambio, se nota cierto defecto óptico que distorsiona algunas tomas, quizá por la calidad del equipo de grabación.
Un ritmo narrativo muy dinámico, su escasa duración y falta de pretensiones hacen de ella una cinta más que disfrutable aun sin ser una obra mayor.
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