Haz click aquí para copiar la URL
España España · malaga
Críticas de alcaide
Críticas 602
Críticas ordenadas por utilidad
6
30 de septiembre de 2023
92 de 103 usuarios han encontrado esta crítica útil
'Aquel que dijo: más vale tener suerte que talento, conocía la esencia de la vida, la gente tiene miedo a reconocer que gran parte de la vida depende la suerte, asusta pensar cuantas cosas escapan a nuestro control, en un partido hay momentos en que la pelota golpea el borde de la red, y durante una fracción de segundo puede seguir adelante, o caer hacia atrás, con un poco de suerte sigue hacia delante, y ganas, o no lo hace, y pierdes'

La caída de la Torres Gemelas, precipitó la marcha de Woody Allen a Europa, con una primera parada en Londres, para rodar la magnífica 'Match Point' (2005), título que daba inicio a una nueva etapa viajera en su cine, marcado igualmente por sus particulares obsesiones, pero con un giro creativo muy destacado, que tomaba como referencia aquel cine criminal, rodado entre los años 50 y 70 del Siglo pasado en el viejo continente.

No parece casualidad, que para este virtual testamento cinematográfico, Allen haya elegido la palabra suerte como parte del título, y motor de una historia que bien se puede emparejar a uno de los títulos más celebrados de este nuevo milenio, y de su filmografía en general, porque si bien se podía considerar a Match Point una versión más joven y dinámica de 'Delitos y Faltas' (1989), otro de sus trabajos más celebrados, Coup de Chance incide en ese concepto del azar, bajo el habitual envoltorio sofisticado de clase medio-alta, sobre la que suele desarrollar sus historias.

Rodada y ambientada en Paris, y planteando el clásico triángulo amoroso de celos e infidelidades, con la sombra de 'Crimen y Castigo' de Dostoyevski siempre presente, Allen plantea desde el primer minuto, una historia que parece avanzar algo apresurada, con escasas sorpresas para quien conoce su estilo y obra, y donde los diálogos, verdadero punto fuerte de su trabajo, parecen algo descuidados, y bastante más convencionales de lo habitual.

Pese a ello, siempre es fácil encontrar hallazgos narrativos y técnicos, en un trabajo que juega bien en primera mitad con el contraste entre lo bohemio, tan propio de la ciudad de las luces, y lo extremadamente lujoso, un punto donde contar con el maestro Vittorio Storaro en la fotografía, tan pendiente de iluminar el primer espectro interior con tonos cálidos, en contraste con la frialdad más aséptica de los escenarios opulentos, a lo cual se añade un exquisito gusto por los exteriores naturales, que plasman un otoño en París realmente deslumbrante, acaban por conjugar un paseo más que agradable y placentero, pese a no contar con la chispa habitual, por algunos de los lugares comunes en la obra del genio neoyorkino.

Del resto se encarga ese tránsito musical a ritmo de jazz tan reconocible, y un reparto cumplidor de rostros más bien desconocidos por estos lares, compuesto predominantemente por actores franceses, que por otra parte no deja de ser la bandera que porta el film, y cuya implicación resulta más esforzada por lo general, pese a algún destello genuino de sus principales protagonistas, que realmente acompasada con el texto siempre original y genuino que Allen expone.

Con todo, puede que este Golpe de Suerte no sea una de sus obras mas redondas, se nota un cansancio evidente de la fórmula, e incluso cierta torpeza a la hora de disfrazarla, algo que igualmente, no resta para dejar de considerar la cinta por encima de la media de productos de similares características, planteados casi siempre con bastante menos estilo y capacidad.

Finalmente, y cerca de sus noventa primaveras, el señor Allan Stewart Konigsberg se despide, con números redondos, y una de las filmografías más envidiables, longevas, y justamente veneradas de la historia del séptimo arte, con la que supone su película número cincuenta, sabedor de que el tiempo juega en su contra, pero satisfecho de haber podido demostrar con creces, gracias sobre todo a la suerte, el enorme talento que porta como cineasta, y que básicamente se resume, en haber sido uno de los escasos autores que ha sabido plasmar de forma legítima, la inteligencia en la gran pantalla.


< Lee ésta crítica, y muchas más, en fusionfreakweb.blogspot.com >
alcaide
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4
11 de octubre de 2014
164 de 261 usuarios han encontrado esta crítica útil
En ese universo de creadores cinematográficos contemporáneos, no hay muchos nombres que podamos destacar como verdaderos valores a los que poder defender con absoluta convicción y fidelidad. El norteamericano David Fincher es uno de ellos, su depurada técnica y su sentido visual son demoledores, y le convierten en uno de los escasos realizadores modernos indudablemente adelantados a su tiempo.

Dicho lo cual, se hace dolorosamente cuesta arriba verle al servicio de una historia tan poco estimulante, de esas que perfectamente podrían ser contadas en uno de esos telefilms baratos de sobremesa. Un mal endémico, el de los guiones mediocres, con el que suelen tropezar a veces los mejores directores.

"Perdida" está basada en un best seller de Gillian Flynn del mismo título, que tiene el dudoso honor de haber desbancado a "50 Sombras de Grey" de la parrilla de los más vendidos, y tampoco parece que la novela sea mejor de lo que se nos ofrece en pantalla, pues es su propia autora la que se encarga de adaptar el material al servicio de un film que posiblemente, solo sirva para alimentar el furor ciego de los más misóginos, o el fervor descontrolado de las feministas más convencidas.

Volviendo al medio televisivo, la película también evoca por momentos a una de esas intrigas que puede ofrecer cualquier serie criminal, lo que puede hacer plantearse a más de uno, si era necesario alargar un metraje hasta los 145 minutos, cuando en apenas un tercio de cualquier capitulo de aquellas, se puede contar lo mismo, e incluso con mayor efectividad.

En el reparto, Ben Affleck, ese actor torpón y de registros muy limitados, que no consigue convencer con su rol protagonista, y en todo momento recuerda su mejor faceta detrás de la cámara, donde ha demostrado, con apenas tres películas, mucha mayor solvencia que frente a ella.

Aunque seguramente, el mayor error de bulto del casting sea la presencia de Neil Patrick Harris, - aquel "Médico Precoz" de la TV, o más recientemente Barney en "Como conocí a vuestra madre" - en un papel dramático que suena a chufa, y que no hace sino elevar a disparatado el tono general de su argumento, acercándola a aquellas exitosas sombras literarias ya mencionadas.

Como contrapunto positivo, las actrices Rosamund Pike, con una presencia magnética cuyo mejor punto a favor es una mirada inquietante, y Carrie Coon, la esforzada y sufridora hermana de Affleck, mejoran el nivel interpretativo, pese a estar sumidas en el citado caos narrativo por el que acaba despeñándose un film que, en resumidas cuentas, será recordado por no merecer a un director de la talla del maestro Fincher, a los mandos de un proyecto tan indigno de su talento.



> Lee esta crítica, y muchas más, en Fusion-Freak.com <
alcaide
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
1 de diciembre de 2021
87 de 136 usuarios han encontrado esta crítica útil
Seguramente, la mejor película de lo que llevamos de siglo sea 'Pozos de Ambición' (2007), del maestro P.T. Anderson, una pieza de artesanía, dotada de una solemnidad extrema, que se atrevía a revertir los códigos de varios géneros, creando casi uno propio, a través de elementos técnicos novedosos, como el uso de una música experimental, retrocediendo al pasado para intensificar su inaudito e indomable carácter de modernidad, en un relato que expresa, desde el prodigio de todos los elementos que la forman como película, ese conflicto surgido en los albores de 1900 entre religión y capitalismo.

Tras varios años sin llamar mucho la atención, y nunca al nivel de los 90, la realizadora Jane Campion parece haber recuperado el aliento de 'El Piano', su obra más reconocible, para renombrar aquel estilo de intimidad dramática, a través de la adaptación en solitario la novela de Thomas Savage, ambientada en un rancho de Montana en 1925, donde los hermanos Burbank, Phil y George, van a entrar en disputa cuando el segundo se enamore de una viuda de un pueblo cercano.

No parece casualidad, tras contemplar la puesta en escena, y las formas tanto narrativas como visuales, que Campion asuma como referencia a Anderson, y tampoco debe serlo que tome prestado a Jonny Greenwood, guitarrista de Radiohead, y compositor habitual del realizador, para componer ese golpe de rabiosa contemporaneidad que persigue el relato, cuyo espectro tenebroso y simétrico, contempla los mismos códigos de ambición expuestos en aquel pozo.

Del reparto, señalar el póker de ases de unos muy implicados Jesse Plemons y Kirsten Dunst, portadores de una cálida timidez a los que se une Kodi Smith-McPhee, en un papel que requiere un extraño equilibrio emocional, y del que por suerte, consigue salir bastante airoso, mientras Benedict Cumberbatch realiza el papel de su vida, lo cual son palabras mayores, dando vida a Phil Burbank con inquietante templanza, sujeto a esporádicos estallidos de rabia, y esforzado al máximo para construir un personaje verdaderamente memorable.

Más allá de los logros interpretativos o técnicos, entre los que también destaca el excelente trabajo de fotografía de Ari Wegner, sumido en la nítida penumbra de los bellos paisajes oceánicos, unido a los interiores de tono aséptico, perfectos para fomentar el aislamiento, el triunfo del film viene de esa mirada de Campion desde la distancia, sin juzgar, lo que le permite deambular sobre los personajes, mostrando las complejas idiosincrasias inherentes a cada uno, que incluye algún perfil abstracto e incluso deformado, casi siempre retratado con pinceladas sutiles, algo que se extiende a una narración plagada de detalles, de esos que se hacen fuertes en el subconsciente una vez ha terminado la cinta.

Precisamente, y para terminar, este es uno de esos relatos cinéfilos que se engrandecen con el paso del tiempo, y se hacen fuertes con nuevos visionados, serán muchos lo que no regresen a ella, por su absoluta falta de comercialidad, los menos, descubrirán un trabajo íntimo que consigue acariciar las notas de lo solemne, con enorme sutileza y las suficientes dosis de talento, como para inscribir su nombre entre las películas contemporáneas, dotadas de una auténtica raza renovadora.



<Lee ésta crítica, y muchas más, en Fusion-Freak.com>
alcaide
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
27 de agosto de 2016
40 de 46 usuarios han encontrado esta crítica útil
Así, con una de sus típicas frases para el recuerdo, implícita en la propia película, presentaba el maestro Woody Allen su último trabajo en el pasado Festival de Cannes, con la vitalidad impropia de un octogenario que lleva alrededor de cincuenta años en ese negocio de hacer cine, convertido, por derecho propio, en uno de los pocos genios capaces de convertir sus obras en verdaderos tratados sobre la inteligencia.

Fiel a su cita anual, el film número 47 de Allen, supone un regreso consciente a esos deseados años 30, que tanto se han prodigado a lo largo de su filmografía, escenario prefecto sobre el que desarrollar, con grandes dosis de virtuosismo y elegancia, esa clásica histórica romántica que para la ocasión, viste sus mejores galas, bien apoyada en la narración en off del propio realizador, perfecta para apuntalar todos los detalles de un retorno al pasado, que contempla en su estructura un homenaje continuo a la Época Dorada de Hollywood.

Administrando con mano firme todos los recursos a su alcance, entre los que sobresale la siempre magistral paleta de colores de Vittorio Storaro en la fotografía, la fórmula de Allen sobre la comedia, que es igual a tragedia más tiempo, encuentra la posibilidad de mostrar un aspecto oscuro y descarnado en la trama, insertando un hilo argumental sobre el por entonces omnipresente mundo del hampa, que curiosamente, parece menos violento, o cuando menos más relajado, que los certeros vaivenes emocionales que expresan sus protagonistas.

Todo ello sin perder de vista algunas de las particulares obsesiones que han hecho grande el cine del maestro, de su amado Jazz a las habituales reflexiones religiosas que como no podía ser de otra forma, tienen al judaísmo como motor central de un desarrollo que, ciertamente, soporta algún altibajo, en parte derivado de ese contraste entre ciudades, Nueva York y Los Ángeles, en la que, como era de esperar, acaba ganando la partida su querida Gran Manzana, con una imagen icónica para el recuerdo, esta vez en color, del mítico Puente de Brooklyn, una momento que seguro, deslumbrará a los más devotos seguidores de tan incomparable autor.

Del reparto, destaca la incursión de Jesse Eisenberg como perfecto álter ego de Allen, en su segunda colaboración tras "A Roma con amor", pero asumiendo en esta ocasión labores de protagonista absoluto, de ese triángulo que forma con la dos Verónicas, Blake Lively y Kristen Stewart, dos actrices que recuerdan lo gran director de actores que es el maestro neoyorkino, del que siempre se ha dicho, no sin razón, que es capaz de conseguir una buena interpretación hasta del actor más mediocre. Completa la siempre estimulante presencia de Steve Carell, cuyas formas encajan a la perfección en el particular universo del realizador.

Finalmente, la buena noticia es que, tras ochenta primaveras, el entusiasmo de Woody Allen se mantiene intacto, buena prueba de ello, es que prepara el desembarco de su primera serie de televisión a finales del mes que viene, "Crisis en seis Escenas", ambientada en la convulsa Norteamérica de los años sesenta, una periodo que conoce bien de su etapa como humorista, previo a su debut como cineasta.

Un nuevo retorno como cronista a una época pretérita, que seguramente, y como ocurre con Café Society, volverá a contener ese punto de nostalgia tan deseado, una marca de estilo presente en muchas de sus mejores obras, que considera que cualquier tiempo pasado fue mejor, pero sin caer nunca en el pesimismo, aspecto que el genial realizador sabe manejar con incontestable grandeza.



<Lee esta crítica, y muchas más, en Fusion-Freak.com>
alcaide
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
18 de noviembre de 2018
35 de 40 usuarios han encontrado esta crítica útil
Parece haber cierto consenso no escrito entre realizadores, cuando se trata de abordar el género espacial, que por alguna clase de extraña catarsis, les obliga a ralentizar, quizá por asumir esa consabida falta de oxígeno, el tono de dichas aventuras, siempre excesivamente contemplativo y monótono.

Parte de ese defecto, acompaña la ópera prima de Christopher Caldwell y Zeek Earl, escrita desde su propio guión original, y desarrollada previamente en un cortometraje del mismo título, que al igual que ahora el film, explotaba el potencial del planeta boscoso en el que se desarrolla la cinta, la cual plantea un escenario muy cercano al Western retro futurista, que recuerda a algunos títulos celebrados de Serie B como ‘Atmósfera Cero’, aquel ‘Solo ante el peligro’ en el espacio que protagonizaba Sean Connery, ya en el otoño de su carrera.

A través de un convincente e ingenioso diseño de producción, adosado a un vestuario igualmente imaginativo, ‘Prospect’ triunfa con su apuesta minimalista gracias a un diseño convincente, y un destacado gusto por los detalles, expresado en elementos tales, como el factor orgánico del basto territorio arbóreo, al que se ven condenados sus protagonistas

En el reparto, el buen hacer de una joven Sophie Tatcher y del televisivo Pedro Pascal, supone otro punto a favor que añadir al film, que se beneficia de una improbable química entre dos personajes tan antagónicos, forzados a colaborar por mera supervivencia.

Finalmente, y pese a un ritmo lento y plomizo en algunos de sus pasajes, Caldwell y Earl presentan credenciales para el futuro, aunque solo sea por el mero hecho de haber salido airosos de un género tan trillado, gracias a que su aventura espacial porta una estética sorprendente, que se las arregla por si sola, para de diseñar un universo propio y genuino.



<Lee esta crítica, y muchas más, en Fusion-freak.com>
alcaide
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow