Tal vez últimamente se haya perdido la majestuosidad y emoción que tenían las películas de antes. Las de hoy en día son, en su mayoría, productos para el consumo de las grandes masas y que, al aficionado del buen cine, rara vez le clavan en la butaca como antaño.

Pero nada más comenzar, te das cuenta que "Réquiem por un sueño" no va a ser una película como las demás. Al pasar media hora, simplemente te olvidarás que estás viendo una película. Estarás tan dentro de la historia, tan cerca de los personajes, que sentirás esa angustia que ellos sienten en tus propias carnes.

"Por obligación", habrá que hablar del buen trabajo de los actores (magníficas sobre todo Ellen Burstyn y Jennifer Connelly, de lo profundo del guión, de esa asombrosa manera que tiene Darren Aronofsky de filmar y montar, la muy cuidada fotografía... Pero todo eso valdría si se tratara sólo de una película. De verdad, al finalizar la proyección te preguntarás si lo que realmente has visto ha sido una película. Quizá tengas que remangarte la camisa para comprobar si la inyección te la pusieron a ti.

Jurtel

De Tarantino lo único que pone de acuerdo a admiradores y detractores es la afirmación de que es único. Y todas sus películas, hasta ahora lo han sido. El éxito de público y crítica de Reservoir Dogs (arrollador debut), Pulp Fiction (muy pocas cintas tienen la etiqueta de "clásico instantáneo") y Kill Bill (obra de culto en pocos años) es incontestable.

Pero aquí nos encontramos con "Jackie Brown", que pareció decepcionar a admiradores de Tarantino y dejar indiferentes a los demás. Admitiendo que no está a la altura de las obras maestras anteriormente citadas, hay que decir que está a a años luz del 95% del cien actual. Una muy trabajada trama, una dirección mas sobria y clásica pero igual de maravillosa, montaje marca de la casa y actuaciones memorables: Michael Keaton fabuloso, Pam Grier radiante, Samuel L. Jackson y Robert Foster soberbios y, ojo, la última actuación sobresaliente del gran (y tristemente en decadencia) Robert deNiro desde "Casino" hasta la actualidad.

Si aún no la habéis visto, no lo dudéis.

Tal vez ha sido por las buenas críticas que había leido, pero la verdad es que Batman Begins me ha decepcionado bastante. Lo mejor, sin duda, Christian Bale, espléndido como siempre. Lo demás no está mal. La historia del origen de Batman está lograda, pero la trama ya como superhéroe tiene muchos altibajos. El metraje es a todas luces excesivo, llevando a momentos de aburrimiento. Incluso de estupefación, con todo el tema "alucinógeno".

A mi juicio, incomparable con la primera versión de Burton. Christian Bale sí está mejor como Batman que Michael Keaton, pero un minuto de la actuación del genial Nicholson como Joker se merienda a los dos "malos" de esta vez. Por no hablar de la gran banda sonora de Elfman y Prince. La trama mucho más lograda y desde luego, la película más entretenida. Decepcionante Cristopher Nolan. Ya bajó mucho el nivel de la magnífica Memento a la más convencional Insomnio. Ahora vuelve a bajar. ¿Lo siguiente?

Muy buena película sobre el amor, sobre sentimientos, sobre pasión, en fin, sobre la vida misma. No se hace pesada, aunque prácticamente todas las escenas sean de diálogos de los personajes en interiores.

Magníficos todos los actores, Jude Law como siempre muy natural y Clive Owen destacándose como un gran descubrimiento. Pero quería reseñar a Natalie Portman, si alguien pensaba en el encasillamiento como Padme Amidala se lo quita de un plumazo, y Julia Roberts, no siento nunca santo de mi devoción, aquí resulta muy creíble.

En resumen, película muy recomendable que no dejará indiferente a nadie. Y ojo a la canción de la película, maravillosamente integrada en el film al principio y al final.

"Medianoche en el jardin del bien y del mal" es de las películas que más me han gustado ultimamente. Es cierto que tiene algunos fallos, sobre todo el tema místico, que nunca queda claro en la trama, y parece más bien brujería barata... pero el trazo que le da Eastwood a los personajes, los maravillosos paisajes de Savannah, la interrelación de los ciudadanos, una muy buena trama judicial, la magnífica fotografía, y sobre todo la magnifica actuación de los protagonistas: el siempre cumplidor John Cusack, el fantástico Jude Law (quiero romper una lanza a su favor y desmarcarle de algunos malos actores actuales como Orlando Bloom o Leonardo diCaprio) y el magnífico Kevin Spacey, en otro trabajo para enmarcar.

En resumen, película muy recomendable de Clint Eastwood, llegando casi al nivel de sus cuatro obras maestras: Sin perdón, Los puentes de Madison, Mystic River y Million Dollar Baby.