No es sólo una película de acción, es la superación de unos dogmas y de unos miedos interiores de un policía. Es pura esencia de la filosofía asiática en lo que define la búsqueda del honor perdido y el incansable sentido del deber. Jackie es un magnífico director de cine de acción mezclando trozos de un humor sensato sin nada de mal gusto en la intención de hacer reír.

Las escenas de lucha son memorables y más sabiendo que este señor entrenaba 20 horas al día cuando tenía 19 años para poder dar esa plasticidad en la pantalla. El cine policial asiático se merece una película así de entretenida y a la vez dura y profunda.

Sin duda este es el papel por el que pasara a la historia Jean Reno, para mi gusto no es la mejor película de Luc Besson, pero es una historia tan poco convencional que termina dejándote un gran sabor de boca. La vida de León es tranquila y simple, sus extrañas costumbres y su peligrosa profesión no impiden que lleve una vida tranquila y en calma. León es un profesional porque hace bien su trabajo, lo hace perfecto, es silencioso, discreto y no deja huellas. La existencia de León se turba por la llegada a su vida de una niña a la que sentirá el deber de proteger y con la que surgirán confusos lazos afectuosos.

La película en su día fue tachada de inmoral ya que estaba claro que el personaje de León estaba enamorado de la niña, pero no es del todo cierto, León nunca conoció el amor y lo que experimenta con la niña es una simple sensación de bienestar que nunca ha tenido en su vida. Las interpretaciones en esta película son redondas, desde el mismo Reno hasta Gary Oldman, los personajes están sacados de la mejor imaginación, tienen todos su propia personalidad y características físicas que los hacen fácilmente detectables en la pantalla. El trabajo de Luc Besson es una maravilla, ya no sólo como director sino también como guionista y productor de numerosas películas que pasaran a la historia no como obras de arte, pero si a la historia personal del individuo como productos de brillante entretenimiento. La riqueza de León radica en la enorme imaginación del director, que se gusta así mismo con este tipo de películas donde sabe lo que el espectador espera para no dejarlo decepcionado.

En mi opinión es la película de menor categoría de mi director favorito. En especial por la actuación de Lambert que le queda muy grande el papel. Pero si te gusta la buena música y el ingenio de Luc Besson es más que recomendable ver esta cinta, aunque ya tiene sus años. Hay escenas muy curiosas, pero quizás como dice el título falta algo de luz. Adjani está exquisita, Lambert seguramente muerto de hambre.

El tipo consigue lo que quiere, hipnotizarte dos horas y hacerse rico. Este director siempre ha trabajado para la industria, cosa que no está nada mal porque la mayoría de las veces lo hace muy bien. La verdadera pena es que esta película es sensiblera por donde se mire y a veces el espectador quiere un tipo de entretenimiento más realista, aunque siempre sabemos que se trata de ficción. Muchas veces cuando se quiere dramatizar mucho se llega a un fenómeno llamado Kisch, que convierte las cosas en horteradas de mal gusto. Lo mejor de todo esto es la pasta que se embolsó y 11 Oscars, un premio muy sobrevalorado.

Apoteosis de lo Comercial.

El club de la lucha


Fincher peca de pretencioso en este largometraje. Con su peculiar forma de ver el materialismo y su generación el director hace gala de su talento para dirigir a buenos actores en una historia que no convence. Su excesiva duración la hace un film bastante pesado y su final es bastante poco ingenioso. Por lo general esta película tiene una buena dosis de crítica social y es lo que más me gusta de ella. Poder pegar a tu propio jefe, dejar es estrés a través de la violencia y ser uno mismo y no producto del materialismo son rasgos destacables de esta película. En cuanto a los actores Norton me parece formidable, en su línea como siempre. Y el infravalorado Pitt consigue una caracterización magnifica. Es una lastima que haya hecho “Troya” y “Leyendas de pasión” películas que lo han dejado como un simple actor comercial y un guaperas pastelón. Mi conclusión final es que comparado con las películas que se hacían en USA en la época esta es muy superior y Fincher un director de futuro que no está a la altura de Nolan.