Lo primero que debo decir es que he leído malas críticas de esta serie, y todas ellas están basadas en que no es históricamente realista. Sin embargo, debemos recordar que esta, como cualquier otra serie, película o novela (en definitiva, como cualquier producción artística) es ficción. Es decir, aunque se base en hechos reales, los espectadores, al verla, son (o deberían ser) conscientes de que lo que se cuenta no es ni mucho menos la realidad. Puede ser verosímil, pero ya está.

Así, vista como una obra de ficción, la serie realmente no es mala, a mí me ha gustado en muchos aspectos, pero si eres un ateo que no soporta a los creyentes, seguramente no te gustará porque se hace uso abundante de elementos sobrenaturales: milagros, apariciones, etc. Todo depende de si la ves como una historia real (si es así, no la creerás) o si la ves como una historia de ficción, como se ha dicho, o una historia fantástica, incluso.

En definitiva, si te gusta la historia de Jesucristo (ya sea porque eres creyente, ya sea porque simplemente te gusta porque te parece bonita, interesante o lo que sea), esta serie te gustará también, probablemente. Aunque he de decir que la serie parece incompleta, porque el capítulo 12 acaba de tal manera que parece que no ha acabado, y es que parece ser que la suspendieron. Pero bueno, lo dicho, resulta interesante, al menos.