Esperaba con entusiasmo ver esta película después de haber leído la novela de título homónimo del inglés E. M. Forster. ¿Cómo podría Ivory resolver cinematográficamente un argumento tan limitado, tan minimalista? La novela -la buena novela escrita por autores excepcionales- dispone de instrumentos para hacer viable a lo largo de páginas y más páginas argumentos que son casi anécdotas. En el cine dicha operación, según mi experiencia, es casi imposible.

Y esta película es una confirmación más. Imagen Ivory al servicio de un guión que empieza a cojear a partir del primer tercio de film. La fotografía, la recreación histórica, el medio, totalmente irreprochable, como siempre ocurre con Ivory. Pero el guión, ese es otro cantar.
La línea argumental, el interés, se pierden pronto. La personalidad del director, la fotografía, los diálogos y las actuaciones persuaden de aguantar hasta el final.

Recomiendo su visualización como haría con toda película del tándem Ivory-Merchant, pero creo que puede ser aburrida para las personas que no fijen su atención en los puntos positivos que ya he reseñado.

¿Una biografía sobre un cantante de rock que murió casi en la adolescencia, aderezada con buenas canciones? No, es algo más. Mucho más.

Es una película que me ha hecho vivir intensamente a lo largo de todo el metraje. El carisma del protagonista, junto con las excelentes actuaciones del resto del reparto te acompañan en un sueño que no quieres que termine. Emoción de verdad. ¿Y la dirección? Yo no estaba en el sillón de mi casa mirando el televisor; estaba en los 50's, acompañando a Ritchie en su meteórico éxito, disfrutando con su múscia.

De forma objetiva, la película es superficial en muchos aspectos, pero el guión es tan bueno que solo sacas ese análisis una vez que ha terminado, pensándolo de manera fría. ¿Y a quién le importa?, digo yo. Let's rock'n'roll!

Una regla bastante sólida que se da para la creación de historias es aquella de que entre pico y pico de acción hay que introducir valles, para no saturar al receptor, y para establecer un sistema de referencia que permita hacer que esos picos sean realmente puntos culmenes (como en la vida misma, no todo es felicidad ni todo desgracias).
Pues esta película se salta la regla. Para bien. Absolutamente toda, de principio a fin, es acción. ¿Acción de tiros peleas velocidad? Pues sí. Pero también mucho más.

Cuando una película tiene la capacidad de hacerte sentir, sea lo que sea, ya ha recorrido un gran camino. Y esta lo hace gracias, en parte, a su sólido guión. Nada de trama que salga de la chistera del guionista. La línea argumental funciona como un reloj suizo. Personajes arquetípicos y diálogos que encajan con ellos y en la trama, todo al servicio de la historia, sin mamarrachadas. ¿Qué más se puede pedir?

La dirección es el otro pilar que sustenta el film. Las cosas se pueden mostrar de muchas maneras. En esta película se hace de tal forma que quedan de lo más "guay". Esto es algo esencial en toda película, pero más en las de acción, en las que el rango de emociones queda reducido por razones obvias.

Totalmente recomendable, y además diría que una de las mejores de Arny (aunque tiene muchas, claro).

Finales del S.XVI. Un grupo de colonos ingleses llega a una isla del Nuevo Mundo, frente al actual estado de Virginia. Algo extraño ocurre en ella, pero aún así deciden quedarse...

Película de entretenimiento que ya quisieran muchas "jolibudienses" de altos presupuestos. Una interpretación telefílmica pero pasable sustentada en un guión eficaz es la baza que tiene esta película para ser visionada sin ningún problema. A los acérrimos enemigos del tembleque de cámara (entre los que me incluyo), que no se preocupen por las escenas iniciales.

Lo mejor, como digo, el guión. Causalidad y evolución de historia, y una ligera intriga que te dejan ver la peli sin que te estés acordando de la mamá del guionista. Ciertamente me sorprendió; lección que deberían aprender por tierras californianas: pagad más a los guionistas, y menos a los dueños de los estudios informáticos (por lo de los efectos, digo). Eso permite salvar una obra de la pura quema, como le ocurre a esta.

Dirección muy mediocre, que empequeñece el film. Yo creo que se podría haber sacado algo más de la película con una dirección más competente. La fotografía no está mal, ni los efectos ni los decorados.

Recomendable para pasar una noche poco exigente; además, dura poco.

Curioso bodrio de enorme presupuesto que parte de una nadería, se desarrolla (por decir algo) a golpe de unas cuantas naderías y termina insultando al espectador con una inteligencia más allá de los 12 años.

La ambientación roza el aprobado, pero si se tiene en cuenta el dinero que ha costado, se diría que suspende estrepitosamente. Mucha falsedad y tomas relativamente cerradas que añaden más cutrez al asunto.
Los actores es un apartado no ya de ineptitud, sino de verdadera vergüenza ajena. Un verdadero insulto.

El guión es lo más oloroso del asunto. Si ya la "novela" en la que "se basa" (las malas lenguas dicen que la concepción de novela-película fue a la par, derivando la primera de la segunda y no al revés, y utilizando la maquinaria de amazon como apisonadora publicitaria) este producto es un cúmulo de despropósitos pseudo-técnicos, la película coge tan solo las partes de "aventura" formando un mejunje no ya desconcertante, sino tan apresurado que pierde el sentido (el interés se perdió en los primeros minutos de metraje).

No voy a hablar de la perversión de la realidad en cuanto a relaciones de las personas, funcionamiento de la agencia, personalidades de los científicos, etc. porque es demasiado abstracto para quien no se haya percatado, y para quien sí lo haya hecho es como si le pusiera una alarma de zafarrancho de combate al lado de la oreja.

Un truño de proporciones épicas firmado por un famoso nombre (no creo que lo haya dirigido ni una persona, un mamífero peludo de tamaño mediano es más que suficiente). No sirve ni para sacarle fallos para aprender qué es lo que no hay que hacer.