Espléndida serie televisiva de corte policíaco, en la que las historias personales de los distintos personajes adquieren mayor relevancia que el desarrollo del caso en sí. Excelente labor de los actores que, aunque el papel de Kathryn Morris adquiere un cierto protagonismo, otorgan a la serie un carácter coral. Gran trabajo también en los guiones y producción, con constantes ambientaciones de distintas fases de la historia reciente norteamericana. Y, sin duda alguna, soberbia banda sonora que se coordina a la perfección con cada momento emocional del capítulo, -especialmente con el final-.

Excelente alegato antibelicista de uno de los mejores directores de todos los tiempos. Denuncia clara e inequívoca de la existencia de clases. En la guerra no hay ni gloria ni honor, sino muerte, destrucción y desolación. Pero siempre pagan los mismos. Siempre. No falla. Es axiomático.

Una cosa es adaptar al lenguaje cinematográfico a los personajes más populares del comic-book norteamericano de superheroes -por cierto, género artístico en muchas ocasiones infravalorado-. Ahora bien, muy distinto es adaptar cómics de clara tendencia reflexiva. Espero que ningún iluminado esté preparando por ahí un storyboard de Mafalda. ¡No me imagino en la cartelera una adaptación de las viñetas de Forges en El País!. Un único consuelo para los padres de familia: los más pequeños se entretienen mirando a ese estrafalario felino con tendencia a evitar las recomendaciones planteadas por cualquier endocrino con dos dedos de frente.

A pesar de haber elegido acertadamente el grupo de superhéroes más querido del universo marveliano, la película no transmite la esencia del cómic de Stan Lee; quedándose a medio camino la ejecución de los personajes, ya que los actores se limitan a enfatizar los tópicos más asociados a cada uno de los héroes. Sin duda alguna, "Conan, el bárbaro", "Superman", "Spiderman" o "La Patrulla X" muestran un resultado más digno del lucroso acercamiento de la industria cinematográfica al mundo del comic-book norteamericano.

Pues eso... hechos como los relatados en esta película solamente pueden ocurrir en los Estados Unidos de América... claro está, en ningún sitio como allí nuestros esfuerzos son tan bien recompensados ni también en ningún otro sitio se goza de las oportunidades propias de la tierra de la Libertad. Predecible. Por cierto, resalta ver a Barbra Streisand haciendo de prostituta de lujo...... ¡y cobra 500 $ por un....!. Para pasar el rato.