Haz click aquí para copiar la URL

Guardias y ladrones

Comedia Espósito es un ladronzuelo que tima a los turistas en Roma, pero tiene la mala fortuna de volver a coincidir con una de sus víctimas. Se inicia entonces una larguísima persecución por parte del policía Bottoni, que al fin logra detenerle. Pero en un descuido, Espósito logra huir. Los superiores de Bottoni le comunican que, si no logra capturar al timador, se quedará sin trabajo. Así que Bottoni, para atraparlo, llegará a introducirse en ... [+]
1 2 >>
Críticas 6
Críticas ordenadas por utilidad
7 de enero de 2010
21 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
En sus inicios el gran director Mario Monicelli firmó varias películas en colaboración con Steno, mostrando ya sus grandes dotes para la comedia, como en el caso presente. "Guardias y ladrones" nos presenta a Esposito, un timador especializado en pequeños engaños a turistas e incautos que, por desgracia, comete el error de estafar a quien no debía, siendo perseguido y atrapado por un obeso policía, Bottoni; no obstante, el ladronzuelo logra escaparse, y los jefes del guardia le conminan a detenerlo so pena de despido. Con tal fin, Bottoni investigará a la familia de Esposito.

Pese al tono cómico que lógicamente preside el filme, también son de destacar las acertadas pinceladas que nos ofrece acerca de la sociedad italiana de posguerra; la ayuda estadounidense, la pobreza de los extrarradios urbanos, las estrecheces a que se ven sometidas las familias humildes, etc. Así, cuanto más indaga Bottoni acerca de Esposito, más se identifica con su problemática, y la ayuda interesada que al prinicipio presta a su familia acaba convirtiéndose en una honesta solidaridad.

La película destaca fundamentalmente por su acertado guión (resulta aconsejable verla en versión original, para captar los giros y tonos) y por sus geniales interpretaciones, con el célebre Totó a la cabeza, componiendo al digno timador, y Aldo Fabrizi encarnando al policía. La mano de Monicelli se deja sentir en la secuencia inicial, muy ingeniosa y bien contada, y también en la conversación que más adelante sostienen Esposito y Bottoni en la escalera de la casa del primero, magistralmente rematada con la comida familiar. La conclusión de la historia, aunque esperada, es divertida y triste a la vez, dejando en el espectador ese regusto agridulce que tantas veces es indicio del buen cine.
Quatermain80
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de julio de 2013
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Genial película del dúo Steno-Mario Monicelli, con dos actores, Totò y Aldo Fabrizi, sencillamente inconmensurables. Totó es un ladronzuelo de poca monta que tiene como una de sus especialidades el timar a turistas recién llegados a Roma. Tras una de estas aventuras, tiene la mala pata de volver a coincidir con una de sus víctimas, se inicia entonces una larga, larguísima persecución, a cargo del regordete policía Bottoni (Aldo Fabrizi), que al final logra detenerlo, pero el bueno de Totó es muy escurridizo y logra escaparse, entonces sus superiores lo ponen ante una difícil tesitura: si en el plazo de tres meses no lo atrapa, se quedará sin trabajo.

Como ya he comentado, Totò y Aldo Fabrizi están sencillamente inconmensurables. Pocos actores tan divertidos como Totó, su largo rostro puntiagudo, su boca saliente, sus ojos grandes y caídos ayudaban a una comicidad que él sabía conducir por los caminos de la ternura, fantástico, maravilloso como ese ladronzuelo de poca monta al que todos le tomemos afecto. Grande, grande también el trabajo de Aldo Fabrizi, el extraordinario sacerdote de “Roma, città aperta”, que mostraba aquí sus espléndidas condiciones para la comedia y que consigue que también los policías de “Guardias y ladrones” sean vistos con cierta simpatía.

A simple vista podría parecernos la típica comedia de enredo en la que acabemos desternillándonos de la risa, pero yo de vosotros no me fiaría, aquí reside la gran magia del director italiano, poco a poco acabaremos embaucados hasta llegar al magistral final de la película, donde sin darnos cuenta seguramente notaremos que la película nos ha llegado adentro, hasta la más sensible de nuestras fibras y probablemente descubriremos con sorpresa que una pequeña lagrimita rueda por una de nuestras mejillas.
Juan Marey
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de agosto de 2013
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Guardias y ladrones" es una estupenda obra dirigida por Monicelli y Steno (en una etapa, fines de los años 40 y principios de los años 50, en la que Monicelli dirige sus primeros largometrajes en colaboración con Steno) que aúna la comedia y el drama con la crónica de costumbres, con una sensibilidad social claramente relacionada con el movimiento neorrealista. Totò, en el papel de ladrón, y Aldo Fabrizi,en el papel de policía, están muy bien en sus respectivos papeles.

Lo más interesante quizás del desarrollo narrativo y argumental de este film es que nos hace ver que, a pesar de que el ladrón y el policía son personajes antagónicos, enfrentados, ambos tienen más puntos en común de lo que querrían creer: el policía es un poco malo, y el ladrón es un poco bueno, y ambos tratan de sacar adelante a sus familias. La ironía se extiende a las esposas, a los hijos, al ambiente que rodea a los dos personajes.

Cabe destacar la presencia en el equipo técnico de Mario Bava, futuro director especializado en cine fantástico, como director de fotografía.
Pedro Triguero_Lizana
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
28 de mayo de 2014
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Excelente muestra del neorrealismo italiano. Como es usual, el escenario no está en los estudios sino en las calles y plazas de la destruida Roma. Pero pareciera que todo empieza a recomponerse y la película muestra uno de esos aspectos. En efecto, se trata del imperio de la ley aun en los casos del robo famélico (robo por necesidad). El policía debe convencer al ladrón de que acepte ir a la cárcel. Este aduce que su familia depende de sus pequeñas diarias rapiñas con el destino.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Edmundo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
26 de septiembre de 2011
7 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
En la posguerra neorrealista se jugará a polis y cacos para que se haga justicia y nos vayamos a la cama tranquilos después de habernos echado unas risas. Nos reiremos de una inofensiva imagen de los ejecutores de la violencia legítima y de los ejecutores del mal porque la cruda realidad normalmente no da risa. Los convertiremos en pueblo -en masa para algunos- porque solo nos reímos de lo que consideramos igual o inferior. La chanchullería y la improvisación, la acomplejada xenofobia contra el guiri, un impreciso espíritu político individualista y anarcoide, la exuberancia escandalosa de las maneras, pero también la arraigada compasión que forma parte de una moral transversal y única, cuadro de costumbres de una Italia identitaria que podría ser una España de Berlanga, que cada vez más queda como alimento para la nostalgia, porque somos ya muy europeos y sofisticados, pero que sigue mostrando que cuando el río suena, agua lleva, y que queda algo del poso histórico, por lo que aún nos vemos reflejados en estos antepasados mediterráneos y se sigue produciendo, sesenta años después, el milagro del humor. La bestia hilarante Totò deja claro aquí porque es uno de los actores cómicos más grandes de todos los tiempos, y Aldo Fabrizi le sostiene la mirada, lo que indica la altura cómica de éste.
Talladal
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow