Haz click aquí para copiar la URL

Dos veces yo

Comedia. Fantástico Edwina Cutwater (Lily Tomlin) es una mujer millonaria y gravemente enferma que no quiere morir. Así que encuentra otra mujer dispuesta a aceptar su alma, pero un error durante la "operación" hace que el alma de Edwina vaya directamente al cuerpo de Roger Cobb (Steve Martin), un abogado... (FILMAFFINITY)
Críticas 3
Críticas ordenadas por utilidad
16 de agosto de 2020
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Aquí asistimos a una migración del alma. Con un murmullo insistente y necesario como parte de un ritual proveniente de Oriente, aplicado por la persona autorizada y con los utensilios propios para tan alto fin, puede trasladarse el alma de una persona a otra viva, y eso es lo que pretende una millonaria que siempre ha estado enferma y que la queda poco tiempo de vida.

No se trata de medir la categoría de tontunas que pueden contemplarse a lo largo del film, la medida sería tomada en una tabla diferente, a lo mejor, a otras que medirían las tonterías de otras tantas miles de películas, el caso es que por tonterías que no queden y cuando estas son presentadas con humor, es como si las tonterías se aceptaran con mayor agrado, por tanto ese no va a ser problema alguno. Tampoco creo que las exageradas gesticulaciones de nuestro querido amigo Steve Martin sean otro problema, porque ya le hemos conocido de sobra y cuando sus tonterías son presentadas con el drama debido, pues lo mismo, es como si se aceptaran con mayor agrado.

La migración del alma de un cuerpo a otro no es fácil, eso ya lo adelanto, e incluso puede que el alma del cuerpo receptor no lo haya abandonado y se cree un conflicto de intereses. Creo que con todo lo dicho la película merece la pena con la perspectiva adecuada porque es muy tierna, pero superficialmente, que es mejor aún que profundamente porque así sabes que no vas a llorar; es muy tierna y comprensible aunque esté presentada en medio de tan grandes sandeces.

No podría hablarse de “buena película” si no fuera por la actuación de los actores que están sensacionales y contribuyen con sus inmensos esfuerzos a que te creas el panorama descrito, empezando por el gurú que con su sapiencia y paciencia nos conquista a todos; y luego el perro que hace de socio; más el músico ciego lleno de energía positiva; y el jefe del abogado, atípico ladrón de corazones con un puñado de amantes. De poder decir que hablamos de algo absurdo pasamos a afirmar que lo importante es que todos nos conquistan, y de hecho Victoria Tennant conquistó a Steve Martin porque gracias a la “migración” terminaron casándose de verdad. Como se ve, algo hubo muy real.
floïd blue
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
20 de agosto de 2014
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tal cual el título que llevo en Uruguay. Hecha esta aclaración, diré que gracias a ésta película y su éxito, fue que conocimos a Steve Martin por éstas tierras. Un actor de comedia y de los otros, absolutamente desperdiciado en esos papeles de payaso lindo y repetitivo y escasamente visto en papeles mucho más serios como en "La Trama". El film en sí tiene un ritmo ágil aunque se hunda en clichés. Hay que saber lidiar con el particular humor anglosajón que poco y nada tiene que ver con el nuestro y si se capta y comprende ese matíz estaremos frente a una cinta muy divertida. Recomendable.
Movie Fan
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de junio de 2013
4 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me declaro admirador de Steve Martin, no solo en sus películas, también en sus peculiares apariciones en el Show de los Muppets y Saturday Night Live. Sin lugar a dudas, Steve Martin tiene un puesto ganado con creces en el terreno de la comedia. Pero esta no es la película.
La trama es simple y harto conocida: mujer que se apodera del cuerpo de un hombre y una vez en él se da cuenta de quién es quién en su vida. Steve Martin es, así, un abogado que antes de que la mujer llegara a su cuerpo, se resistía a tener contacto con ella. La verdad es que no es para nada querida la Edwina, interpretada por la también comediante Lily Tomlin. Y a fin de cuentas, cuando por arte de magia, un espíritu cohabita con otro, Steve Martin se echa la película al hombro para hacer un trabajo más que sobresaliente, digno de un Óscar; por cosas menores se han dado premios. Pero es que, francamente, la película no colabora, y Martin queda como un gran bailarín en el lodo.
Valetamayo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow