Haz click aquí para copiar la URL

Matrimonio original

Comedia. Romance La única comedia norteamericana del maestro Hitchcock trata sobre las relaciones de amor-odio de un sofisticado matrimonio de Nueva York que descubre que, debido a un error administrativo, no están legalmente casados. (FILMAFFINITY)
1 2 3 4 5 6 >>
Críticas 27
Críticas ordenadas por utilidad
19 de abril de 2006
40 de 61 usuarios han encontrado esta crítica útil
Resulta difícil de creer que Hithcock sea el director de esta comedia. Ya comienza sin un ápice de chispa y nervio, como para desmoronarse totalmente al final. Pésimo guión y nula fuerza visual - algo inédito en el inglés - para una película a años luz de sus mejores trabajos y aún lejísimos de la muy notable comedia "Pero...¿quién mató a Harry?"
Para mí, lo peor que hizo el maestro en Norteamérica, el cual incluso llegó a tacharla, acertadamente, como una "pérdida de tiempo".
Tomine
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de septiembre de 2010
20 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes de que Hitchcock se convirtiera en un director de género, y mucho antes de que lo fuera de firma y sello, hubo tiempo para probar diversas posibilidades tras la cámara, algo lógico en una época en que Howard Hawks, por citar sólo uno, igual rodaba un western como un drama, igual una comedia que una bélica. En comparación con tantas de sus grandes películas es fácil someter a pública lapidación a una comedia como Matrimonio Original, pero no olvidemos que en casi todos sus títulos el genio inglés demostró poseer un gran sentido del humor y la ironía del mismo modo que tantas de sus películas de suspense lo son en realidad de amor.

Dicho esto, Matrimonio Original tiene mucho de comedia romántica y bastante de Screwball Comedy sin llegar a ser una obra maestra de ninguno de los dos géneros. Partiendo de una idea con muchas posibilidades, la de un enamorado matrimonio que no deja de pelearse y que descubre no estar legalmente casados, nos encontramos algunos de los momentos más divertidos de la historia del cine, como a Robert Montgomery intentando sangrar de la nariz atizándose a sí mismo, pero al mismo tiempo se percibe falta de ritmo y frescura viniéndose a veces la película al suelo. La levantan el ya citado Montgomery y sobre todo la intachable Carole Lombard. El maestro inglés aceptó rodar esta película por su amistad con Lombard, que por aquel entonces era además la casera del director, aunque más tarde renegará de este título y asegurará no llegar a comprender el guión, limitándose a poner la cámara. Sin duda, los dos eran igual de mordaces y Hitch tuvo que escuchar como Carole le explicaba que le daba igual repasar sus escenas para ver su actuación, ya que sólo quería ver como le quedaban las tetas con el sostén.

Y la Lombard se merece un monumento, o al menos un párrafo por mi parte. Ella sola convierte en inmortal este y tantos films, con su sensual belleza traviesa, su desparpajo y su control del movimiento, del ritmo interpretativo ante una cámara. La reina de la comedia de los años treinta nos dejó aquí su penúltima actuación, justo antes de la insustituible Ser o no ser de Lubitsch y de su fatídico accidente de avión, que robó al mundo sus futuros papeles en los cuarenta y cincuenta. Si Marlene Dietrich y Greta Garbo eran las divas de aquellos años, Lombard era el contrapunto rebelde y lenguaraz. A la Garbo ya la satirizó con sus imitaciones en La princesa de Brooklyn, y en esta película vuelve a hacerlo en las escenas de nieve, con paseo en trineo de caballos incluido, que claramente nos recuerdan a La reina Cristina de Suecia, sólo que si Greta se acariciaba la cara con la nieve en uno de los planos más famosos de la sueca, Lombard se la come, la mastica y juega con ella cómicamente.

Lo siento Alfred, pero esta vez no eras el protagonista.
REXMUNDI
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
25 de abril de 2009
24 de 35 usuarios han encontrado esta crítica útil
Divorcio para todos. Me dicen que a Hitchcock le obligaron por contrato hacer esta película, no era su estilo y debió hacerla de mala gana.
Ha habido muchos directores que les impusieron actores, guiones, etc, e intentaron honradamente terminar la película lo mejor posible.
Hay que tener criterio, la película es floja tirando a mala porque está olvidada y jamás nadie dirá que es buena película, excepto alguno que no se atreva porque el director es Hitchcock y el amigo no puede fallar. De ahí la nota que tiene.
Hitchcock era un truhán del Mississippi y funcionaba con sus cartas marcadas, con sus crímenes y sus paranoias, con sus rubias maltratadas por obsesiones que él mismo sufría. El caso es que un amigo quisiera casarse con la novia de su socio, aprovechando que estaban regañados, todo en un ambiente de comedia romántica, no era un argumento que le complaciera y, por tanto, no cumplió; no acertó en nada, ni comedia, ni romanticismo y mucho menos original.
floïd blue
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
14 de diciembre de 2007
20 de 29 usuarios han encontrado esta crítica útil
Film nº 26 de Hitchcock, tercero de su etapa americana. Escribre el guión Milton Krasna a partir de un argumento propio. Se rueda en exteriores de NY y en plató, entre el 5/IX y el 2/XI de 1940. Producido por Harry E. Edington para la RKO, se estrena el 31-I-1941 (NYC).

La acción tiene lugar en NYC a lo largo de varios días del otoño de 1940. El abogado neoyorquino David Smith (Robert Montgomery) y su esposa Ann (Carole Lombard) llevan 3 años de feliz matrimonio cuando un funcionario les informa que su enlace no tiene validez jurídica a causa de una deficiencia administrativa no subsanable.

El film es una comedia romántica, de enredo y de humor. Es una de las dos únicas comedias que Hitchcock rueda en su etapa americana ("Pero... ¿quién mató a Harry?" es la otra). Es, además, la primera cinta que realiza para la RKO. Considerado por muchos como una obra menor, es no obstante una comedia bien estructurada, intensa, de ritmo rápido, de contenido valiente y atrevido en su tiempo, rica en comicidad, de buenas interpretaciones y portadora de la huella inconfundible del maestro. Incorpora un subtexto que trasmite ideas muy propias del realizador: las relaciones de pareja son esencialmente inestables, con frecuencia se dan asociadas a turbulencias y siempre están sometidas a cambios, muchas veces imperceptibles o poco perceptibles, pero importantes, como sugieren los cambios que ha sufrido el restaurante de la época de noviazgo de los protagonistas. La comicidad se basa en episodios de batalla de sexos, malentendidos, celos exagerados, errores y engaños desvelados, que se combinan formando una textura densa, consistente y firme. La obra contiene otras constantes del realizador, como la fascinación y adoración que siente por Carole Lombard, encarnación de la heroína hitchcockiana: rubia, desenvuelta, guapa, inteligente y frágil. No falta la figura de la madre opresora e intrusiva. El cameo del director lo dirige, en esta ocasión, Carole Lombard. Se hace uso de imágenes que explican extremos argumentales: comida que no apetece a los gatos, confianza del que se deja afeitar a navaja, efervescencia sexual de la noche anterior a la escena inicial. Se añaden imágenes vertiginosas y de lluvia, desayunos abundantes, bebidas y comidas, tan gratas al director. Éste muestra su escepticismo y desencanto en escenas que dejan una estela de amargura: la de la sala de fiestas y la de la noria atascada con chaparrón final.

La música, de Roy Webb ("Retorno al pasado", Turneur, 1947), aporta una partitura funcional de apoyo, con melodías alegres, divertidas y, en ocasiones, burlonas e irónicas. La fotografía, de Harry Stradling Sr. ("Johnny Guitar", Ray, 1954), desarrolla una narración visual muy atractiva, dinámica y diligente. Acaricia con fervor el rostro de Carole Lombard, que ofrece una interpretación magnífica. El realizador exhibe un gran dominio de la dirección de actores y del movimiento escénico.
Miquel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2 de febrero de 2010
11 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Zapatero a sus zapatos, eso suelen decir, está claro que es una película dirigida con bastante mala gana, es de saber que Hitchcock es el genio del cine del suspense y nunca de la comedia romántica por eso hizo esta y nada más, está claro que no era su campo.
Partiendo de esto no diré cosas buenas de la dirección aunque las actuaciones son correctas.
La película cae en muchos momentos, hay escenas que no tienen mucho interés y pierden ritmo y energía y en ningún momento la película posee momentos de auténtico humor ni romanticismo, es una cosa sin mucho sabor.
Se ve que Hitchcock busca esos momentos de humor pero no sabe como salvarlos, sin duda sabía como crear suspense pero humor, no mucho.
A pesar de toda la mala dirección y adaptación del guión, la película tiene algo de sustancia en lo relacionado a la vida matrimonial y sus problemas conyugales, de como el amor en el matrimonio existe a pesar de las crisis matrimoniles que se puedan tener y de como éste suele ser quien salva tales problemas.
La película no va más allá de hacerte pasar algún que otro buen rato pero nada más.
manuel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 6 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow