Así del precipicio

"Así del precipicio" es una historia sobre drogadicción, excesos, relaciones personales destructivas, y homosexualidad en todas sus vertientes.

Película dirigida por una mujer, y que trata sobre mujeres, ya que las protagonistas principales son féminas y el desarrollo de todos los actos gira en torno a ellas y en algunos casos "entre" ellas. La perspectiva es de personas acomodadas socialmente, desahogadas economicamente y liberales.(lo que puede indicar una sutil crítica en este sentido hacia ese estrato social).

"Una película adictiva", como reza en la carátula y en el prólogo del propio metraje; y la verdad es que adictiva si lo es, no paran de meterse "lonchazos" a diestro y siniestro como el que se toma unas cañas con los amigos. Es inevitable mencionar a la genial "Requiem por un sueño", ya que la directora calca descaradamente de esta película; lo más eviedente, es la escena del salón del piso dónde se observa a "cámara rapida", como todos se "ponen" hasta las orejas, incluso muchas de las músicas son muy parecidas a las de la película de Aronofosky; se podían haber esforzado un poco más y aunque como influencia es estupenda, se le ha visto el plumero claramente, estando a años luz en cuanto se refiere a calidad, mensaje y manera de plasmarlo.

A pesar de esto, "se deja ver", y aunque por momentos es algo estridente, funciona bastante bien como entretenimiento, y creo yo, no tanto como crítica social. Pretende ser transgresora y lo consigue desde la imagen, con las escenas de sexo, consumos de drogas e intento de hiperealismo, pero se queda en eso, en un mero intento superficial, sin llegar ni por asomo al calado que consiguen otras cintas con más caché como "Traffic", "Trainspotting", o la ya citada "Requien por un sueño".

Aceptable banda sonora, dónde entre otros, encontraremos un tema de Fangoria, y como curiosidad comentar que Ana de la Reguera, tiene un parecido físico razonable con Paz Vega.

Entretenida película light, no por el tema que trata sino mas bien en como lo trata, como lo aborda.

Pretende ser cool y crear polémica. Carente de un buen guión y un total desatino el copiar "Réquiem por un sueño", que es mas que notable, tanto en algunas escenas como en la música.

El resultado me parece una película con falta de honestidad, ya que como últimamente sucede acá en México en cuestiones cinematográficas, dentro del circulo fresón-cool-visionario, queda en simples pretensiones, logrando muy poco, tanto en reflexión, como en el resultado mismo y propio de un filme; chistes mal logrados, palabrotas dichas fácilmente sin sentimiento impreso, actuaciones malas (algunas mas malas que otras), mal guión, mala dirección, y falta, mucha falta de creatividad.

Esta película es un sinfín de intentos adolescentes de querer formar una historia que parece ser el proyecto de final de curso en cualquier colegio, liceo o preparatoria latinoamericana. Es que en algún momento uno se vuelca a reír de tanta tontería. Lo que más llama la atención es que esta película ha contado con mucho presupuesto para hacer qué, nada más que otra película sobre drogas, exceso, sexo pero que al final no aporta nada ni dice nada.

El guión tiene errores fundamentales, el principal: la excesiva influencia telenovelesca en la formación de lo personajes.El segundo error, plantear situaciones exageradas, que por querer lograr mayor intensidad o acción, lo único que logran es la perdida de la realidad que busca tener el film. Por ejemplo: el disparo al niño que limpia el vidrio, por favor, es una idiotez, y peor aún, es la irrupción, pistola en mano, en medio de una boda, Dos mío, quién puede ser tan ingenuo como para incluir eso en una historia que busca mostrarse como "real".

Después, todo es absurdo, los cortes abruptos en la edición, que no se entienden para qué, la influencia notoria en la dirección de películas que van desde la gran Requien for a Dream hasta cualquier cursi dramazuelo con tintes románticos made in Disney.

Además está llena de clichés: Una mujer que llora sentada en el suelo mientras se ve en la toma el teléfono colgando de su cable. Cuántas veces fue visto algo así? Pero el más grande cliché y más absurdo y no sé puede creer que todavía siga siendo tomado en cuenta en películas: una mujer llorando, comiendo helado, mientras mira el vídeo de boda. Pero por favor.

Me parece que la intención de la producción, como de los inversores, fue hacer de esta película una historia lo más cursi posible con una moraleja en medio que sirva para reunir a adolescentes repletos de acné y calentura para enseñarles algo que imagino ya saben: la droga y la arrechura pueden traer consecuencias terribles.

Muy poco cine al final de cuentas.

Las relaciones destructivas, a la coca y al sexo, colocándonos “Así del precipicio”. Para la sociedad supuestamente con mentalidad abierta, el filme logró su cometido “incomodar”, generar polémica y convertirse en otra de las más taquilleras. Con humor negro y a través de la mirada femenina nos exponen las adicciones a las que estamos expuestos, sin profundizar en las temáticas y con un guión sencillo y explicito se busca de alguna manera fomentar la conciencia en la juventud de lo cerca que se puede estar del abismo.

La opinión de mucha gente se contrapone con está visión, al afirmar que hay estimulo para el acercamiento con sustancias prohibidas e incluso la promoción de la homosexualidad; y con esto solo se confirma que los valores morales continúan siendo limitados, y para llegar a la mentalidad del Europeo falta mucho.

Con críticas implacables Teresa Suárez y Ana de la Reguera se colocan en el centro de la controversia; desde mi punto de vista Ana sale airosa ya que las desinhibiciones quedaron fuera del set de filmación y es una prueba de fuego para está actriz que va poco a poco demostrando su multifacético modo de interpretar; con Ingrid Martz y Ana Ciochetti sucede algo similar, aunque sus personajes son poco desarrollados y la autoaceptación es abordada de manera fácil y sin complicaciones; con Gabriela Platas y Rafael Amaya, la artista y el gay se nota más el desmadre y pareciera que el guión no se sustenta en algo serio, pero al contrario, cuando se está inmerso en todo esto es la visión correcta, en la que se resta importancia a muchas cosas.

En este caso le toco a la clase mediera y por fin dejaron a la baja fuera del estereotipo, señalan que como seres humanos tenemos defectos y olvidarnos de los errores que solo atañían a los pobres.

Los creativos siguen proponiendo y el publico dispone con que propuesta se queda, hoy después de las nominaciones al Ariel, Así del Precipicio se quedó en el camino cediéndole el paso a otras películas de mayor calidad.

La trama se centra en un grupo de amigos que se reúnen regularmente en la casa de Piti (Silvia Carusillo), una traficante de droga supuestamente extranjera, pero en especial de tres particulares damas.

Lucía (Ana de la Reguera) una irresponsable directora de arte en comerciales, adicta a la cocaína y a su infiel novio, Mathías (Alejandro Nones).

Carmen (Gabriela Platas), a quien siempre se le puede encontrar del brazo de su mejor amigo gay (Rafael Amaya), su gran amor imposible.

Hannah (Ingrid Martz), una mojigata y aristócrata chica que está a punto de divorciarse, y que puede o no ser homosexual.

El film cuenta la historia de tres mujeres con diversos problemas existenciales entre ellos las drogas, el alcohol y el miedo por aceptar sus preferencias sexuales.

Poco a poco y paralelamente, observamos la autodestrucción o superación, de cada una de ellas. Pero, ¿serán capaces de retroceder antes de caer al precipicio? ¿Qué es estar al borde del precipicio? Es estar ante una prueba que te cambiara la vida o puede que sea una antesala a tu muerte.