De caracoles y hombres

De caracoles y hombres" o "Despre oameni si melci" es una película redonda, una comedia que esconde un drama que hoy nos encontramos día a día, la lucha entre los ideales y la realidad.
Está muy bien ambientada y los actores están a la altura, en especial el "malo", el director de la fábrica, el actor Dorel Visan.
Hay un gran trabajo de ambientación y vestuario que nos sitúan en el año 1992, reciente la caída del comunismo y con las privatizaciones como argumento principal.
Es una especie de fábula realista que no va a defraudar a nadie, se pasan volando los 100 minutos de proyección.

Ésta película la vi por televisión, me encantó su premisa. Sería una comedia para toda la familia sino fuera por una escena de sexo ridícula e innecesaria.

Me encanta cómo está incorporada a la trama la llegada de Michael Jackson al país por la gira "Dangerous" y de ahí podemos deducir la época en la cual se desarrolla la historia, año 1992.

Ésta es una historia de desesperación, queriendo hacer el bien terminamos haciendo el ridículo. Cuando peleamos contra molinos de viento, con un gigante que viene hacia nosotros y ¿qué podemos hacer? ¿Lo que plantea el protagonista?. Bueno, no podemos decir que al menos no lo han intentado.

Las interpretaciones me gustan, tiene un trasfondo dramático que termina resultando triste a pesar de estar concebida como una comedia. A pesar de que hay pocos comentarios, me parece una cinta muy recomendable. Es entretenida, interesante y tiene una conclusión genial.

Si pueden, y quieren pueden echarle el ojo que por lo menos su metraje es corto.

No voy a descubrir el nuevo cine rumano, directores como Cristi Puiu o Cristian Mungiu son referencias ineludibles con títulos tremendamente interesantes que han puesto el cine de ese país en primera línea para los cinéfilos.
Esta es la primera película de Tudor Giurgiu que tengo la oportunidad de ver. Se aleja de los títulos de los autores que menciono más arriba, al escaparse del drama para alinearse del lado de la comedia. Los resultados son dispares. Aunque existe ese transfondo social de denuncia que suele ser habitual en el cine rumano, sin embargo, hay bastante más elementos que recuerdan o parecen intentar copiar el cine de corte Kusturica. Más por el absurdo, la exageración y la comedia. Y ahí la película fracasa porque no consigue el propósito quedándose muy lejos de sus objetivos.
Es una pena porque los primeros minutos mantienen bien el tipo, allí en los que el drama pesa más que la comedia, sin embargo, da la sensación de que el guion no ha sabido encontrar su camino en medio de lo mucho que quiere contar. Y de tanto abarcar..., ya se sabe el refrán.
Poco a poco el aire va saliendo por la ventana y la película, la trama, el ritmo, el guion y la dirección, perecen ahogados porque no hay soluciones para tanta línea abierta. No hay continuidad y eso arruina la película.
No tiene la culpa un reparto dispar con interesantes actores y otros que están para adornar que estropean determinadas escenas fáciles de identificar.
Mal como comedia, interesante en el resto, que es bastante.

Vista en la Seminici. Sin entrar en la temática tan actual y socorrida como la crisis económica, sin entrar que trata sobre la socidad rumana, sin entrar que la película trata de ser una gran comedia, sin entrar que la película trata de encaminarla a una temática simplona (sexo) que atrae risas aseguradas, mi impresión es que se queda a medias de todo. La asimilaría un tanto, y con todos los respetos, a "Bienvenido Mr.Marshall" con todos esos obreros super ilusionados yendo para la capital, para ver si convencen al capitalista y pueden salir de su situación. Afortunadamente, aún quedándose a medias de todo, es cierto que la peli se lleva bien, se pasa un buen rato, toca conciencias, y tiene algunos momentos que hace esbozar una sonrisa, como ese que un francés, canta en castellano "Manuela" de Julio Iglesias en un karaoke. Tan esperpéntico que tiene hasta su gracia. Se nota que la base latina en esta película rumana. Bien rodada y bien interpretada