Misión secreta (1965)

Esta película no puede tomarse en serio. Hay que verla exactamente como lo que es: una comedia de espionaje con todas las de la ley… y eso sí ¡es una deliciosa comedia! No por nada están ahí Rock Hudson, Claudia Cardinale, Jack Warden, Guy Stockwell, y la magnífica, Anne Seymour, riéndose cada uno de sí mismo y de todos los que les rodean… porque, ¡hay tantas cosas que deberían ser serias, pero, en la realidad son una payasada!

A mí me recordó de inmediato a la actual clase política en el poder y a ciertas instituciones colombianas, cuyas actuaciones nos ofrecen día a día sonoras carcajadas, de esas que empiezan con risa… pero, luego nos dejan llenos de rabia y de tristeza al saber a nuestro bello país en manos de los más ineptos y corruptos.

Con su guion (co-escrito con W.H. Menger, basados en la novela “Blindfold” que, Lucille Fletcher -la ex del compositor Bernard Herrmann-, publicara en 1960) y con su película, <<MISIÓN SECRETA>>, el director Philip Dunne (celebrado autor de los guiones para títulos tan preciados como, “How Green was my Valley”, “The Late George Apley”, “Escape” y otros tantos), busca parodiar las más “sacras” profesiones y la cacareada seguridad estadounidense, y con un humor pulcro y colmado de tolerancia, logra una historia de espionaje -con científico en líos como cualquier filme jamesbondiano-, donde el buen gusto campea por prácticamente todas las escenas y los llamados, actores de reparto: Anne Seymour (la genial asistente, Smitty), Guy Stockwell (el tartamudo de ocasión, Fitzpatrick), Jack Warden (el airado, General George)… ¡y como no, el avisado mulo, Hinry!, son un soporte perfecto para esta estupenda comedia con la que se pasa un rato delicioso.

Nunca había visto tan bella a la italiana, Claudia Cardinale, luciendo esas prendas ajustadas que resaltan sus prominentes encantos y, Hudson, luce encantador en su rol de psiquiatra y detective de ocasión, jugando a enargollar y a desenargollar a cuanta chica se cruza en su camino… ¡pero a todo anillo le llega siempre el dedo preciso!... El Dr. Bartholomew Snow ¿será, acaso, la excepción?

Relájate y gózate la vida por mal que todo te parezca… al fin y al cabo, por fuerte que sea la tormenta, ¡mañana saldrá el sol!

Pretende ser una película de espionaje emocionante, y se queda en un tostón poco tragable. El argumento es un poco tonto, aunque eso no hubiera tenido importancia si hubiera tenido al menos emoción o algo de chispa, como les pasa a otras en su género. No es muy buena, no.