Tempbot (C) (2006)

Neill Blompkamp lo ha vuelto a conseguir. Tenía cierto temor de ver este cortometraje suyo, District 9 y Alive in Joburg me gustaron demasiado como para que este Tempbot pudiera estar a la altura, pero lo está. Tanto es así, que creo que voy a ir quitándole a Alex Proyas la etiqueta de "futura esperanza del cine de ciencia ficción" y se la voy a pegar a Blomkamp.

Los elementos de su cine aquí se demuestran una vez más, la conjunción entre ciencia ficción y tensión social más perfecta que se puede ver en gran pantalla. Blompkamp ya usaba por aquel entonces la idea del "falso documental", y aunque aquí no se muestra en ningún momento como tal sus cámaras cuentan las cosas como si realmente estuvieran pasando.

Nuevamente se nos ofrece la convivencia del ser humano con algo irreal, en este caso con robots, y lo traslada a un contexto donde todo está normalizado, donde los compañeros de trabajo no se maravillan por tenerle y donde la marginación social es grande. Esta vez el contexto es más realista si cabe, ya que dentro de unos cuantos años estas situaciones serán más que factibles, o al menos más que la de una invasión extraterrestre.

Mientras llegan los próximos proyectos de este posible salvador del género, disfrutar de piezas como Tempbot es un disfrute no solo necesario si no placentero.