Diablero (Serie de TV) (2018)

Creo que en esta crítica no voy a poder ser justo porque para serlo debería haber entendido todos los diálogos, haber captado la ironía de las frases cuando la hubiera y haber comprendido los chistes si los había. Pero no he podido hacerlo porque lo cierto es que el acento de los actores, o más bien mi falta de costumbre de escuchar ese acento, me lo ha impedido. O sea, que la mayor parte del tiempo no he entendido una mierda de lo que decían, porque en esta serie mexicana se hablará español, qué duda cabe, pero con un acento más cerrado que el andaluz de las Alpujarras. Y el caso es que a "Cantinflas" se le entendía todo hace medio siglo, no sé qué diableros ha pasado.
Lo que he podido deducir de la serie es que es rápida, que tiene más que un puntito de irreverencia, que tiene situaciones chocantes y que es entretenida. A veces me ha parecido una versión "mexicanizada" del estilo de Tarantino. Pero no mucho más. Para mí, pasable únicamente.

Crítica 84

El 21 de diciembre Netflix nos retó con una serie sobrenatural mexicana llamada Diablero. La primera temporada se encuentra completa y trata sobre los avatares de Elvis Infante un legendario cazador de demonios quien junto al cura Ramiro Ventura deberán salvar -básicamente- al mundo entero. La serie es una gran burla hacia la iglesia católica mexicana y los agentes de la ley. Por esta transitan traficantes, pero esta vez de demonios y almas perdidas, clubes clandestinos de luchas diabólicas -literalmente-, sacerdotes mafiosos, cultos satánicos y un personaje interesantísimo: Nancy, a quien la crítica define como "una super heroína moderna", esta tiene la habilidad de invocar seres del infierno a su antojo y controlarlos a placer. También hay grandes reminiscencias a las religiones prehispánicas y al temido poder de la mujer y, como si fuera poco, la música viene de la mano de Café Tacuba. Así que apronten sus armas y cuchillas y no olviden algo de agua bendita por si acaso.