¡Mátalo! (1970)

1) Por filmar (?) uno de los peores spaghetti westerns de la historia.
2) Por la estúpida sonrisa y la deleznable interpretación de Corrado Pani.
3) Por intentar darnos gato por liebre con presuntas insinuaciones de "fantastique".
4) Por una fotografía presuntamente "arty" qúe sólo consigue marear al espectador.
5) Por otra horrenda interpretación de Lou Castel en su sempiterno papel de adolescente traumatizado.
6) Por la horrísona banda sonora de Mario Migliardi, que le habría debido merecer el fusilamiento sumario al amanecer. Por suerte, sólo compuso 13 soundtracks durante sus 80 años de existencia.
7) Por la estulticia de los guionistas, que debían ahogar sus penas en tequila y al día siguiente no recordaban lo que habían escrito con anterioridad.
8) Por someternos a un suplicio innecesario de 100'.
Los dos puntos son por la sensualísima Claudia Gravy, que no se merecía este engendro.