Viaje sangriento (Serie de TV) (2020)

Carretera al infierno

Como toda serie antológica de terror, los 6 episodios de Viaje Sangriento (Bloodride) tienen un nivel y tono irregulares. Funcionan de manera totalmente independiente y se pueden ver en cualquier orden sin que afecte al visionado completo de la serie. Tan solo están unidos por una breve introducción que nos sitúa en el interior de un autobús.

En el vehículo viajan plácidamente y pensativos sus protagonistas. Tienen como conductor a un hombre de sonrisa malévola que les observa a través del espejo retrovisor. Podríamos considerarlo como una especie de Cancerbero que les lleva hacia las puertas del inframundo. Cada introducción es ligeramente diferente y se centra en el rostro de uno de los pasajeros para comenzar a explicarnos su historia.

Al tratarse de 6 episodios totalmente independientes, los comentaremos por separado. Te aconsejamos que veas la serie antes de leer la crítica. Aunque evitaré los spoilers explícitos, mis comentarios sí pueden contenerlos implícitamente. Los capítulos tienen una duración que oscila entre los 27 y los 33 minutos, lo que convierte a b en un entretenimiento fácil y rápido de ver. Prepara las palomitas.

Viaje sangriento (Bloodride) es una serie episódica de terror, divertida y fácil de ver. Son 6 capítulos independientes de entre 27-33 minutos que nos llegan desde Noruega, escritos por Kjetil Indregard (Maniac) y dirigidos por Geir Henning Hopland (Lilyhammer) y Atle Knudsen (ZombieLars).

Hay menos terror y sangre del que nos gustaría ver a los horror lovers. Sus capítulos incluyen el cuento de fantasmas sobrenatural, el folk horror o el slasher, dentro de un tono generalizado que apuesta más por el humor o el suspense ligero para todos los públicos. Giros de guion con sorpresa, nos traerán al recuerdo series antológicas ochenteras como los Cuentos Asombrosos o las Historias de la Cripta, pero que nadie espere encontrarse la originalidad o mala baba que tenían muchos de aquellos relatos. Aquí estamos frente a un pasatiempo inofensivo, pero entretenido.

Escrito por Daniel Farriol

Visionados los 6 episodios y leídas las dos críticas a la fecha del «Bloodride» en este sitio, se concuerda sobre conclusiones y cuestiones que el serial noruego origina al momento de emitir un comentario sobre el proyecto en general, el cual puede ser tan sorprendente como irregular. Con sólo treinta minutos en promedio, los directores desarrollan tramas hiladas por personajes en rol de pasajeros de un autobús, quienes no dan mayor dato de su travesía dentro del tétrico vehículo, pero que dan pauta para conocerles y así poder deducir un tanto de su psique y este fatídico desenlace que sirve en todo momento como preámbulo de cada episodio.

Con una grata sorpresa el primer episodio «El sacrificio», es el que tiene un desarrollo de la trama muy natural, donde todo resulta producto de las circunstancias, las casualidades y los fines de alguien que ciego de su inconformidad recurrirá a lo insospechado para conseguir lo que anhela. La efectividad de esta historia podría ser el inicio de una serie fuera de sí, no obstante el resto queda a deber y podría llegar a decirse que «Ratas de laboratorio» y «Elefante en la habitación» quieren mantener ese misterio sembrado en el primero.

Con distintos roles los personajes se encaminan por caminos donde lo atroz es más connotativo que denotativo.

Su categoría se la debe al «sacrificio».