- Sinopsis
- Tres cortos en uno. Tres prodigios de estilo, grafismo y técnicas, del minimalismo expresivo al barroquismo digital para narrar la historia recurrente, eterna, de un pollo y su paseo matutino. (FILMAFFINITY)
- Género
- Animación Comedia Cortometraje (animación) Película de episodios
- Dirección
- Reparto
-
Animación
- Año / País:
- 2011 / Reino Unido
- Título original:
- A Morning Stroll
- Duración
- 7 min.
- Guion
- Música
Premios
A Morning Troll
17 de agosto de 2012
Basada en una historia real titulada ‘El pollo’ que publicó Casper G. Clausen en ‘The New York Literary Review’ en 1986 (y ‘reutilizado’ y atribuido por otros a Paul Auster en ‘Creía que mi padre era Dios: relatos verídicos de la vida americana’), “A Morning Stroll” es consciente de ser un mero sketch y broma. Pero Grant Orchard decide contárnosla tres veces en tres periodos de tiempo diferentes para jugar tanto con la animación como con aquello que rodea y envuelve a sus protagonistas. Esa condición de broma y chiste también estaba implícita en “Welcome to Glaringly”, aunque ahora alcanza la profundidad necesaria gracias a un homenaje a la animación y una mirada de nuestra evolución en ese escenario constante llamado Nueva York.
La historia es sencilla: un pollo y un hombre se cruzan en medio de una calle y la persona se queda paralizada al ver que el pollo sube las escaleras de una casa residencial, llama con su pico a la puerta… y una vez que se abre desaparece en el interior. Pero esa misma historia nos es contada en 1959, 2009 y 2059 para jugar con la evolución en la animación, cultura musical y cinematográfica y dibujar un futuro distópico y apocalíptico. Desde las simples líneas al color y las imágenes en dos dimensiones para pasar al 3D y la renderización, “A Morning Stroll” es consciente de los avances de la animación y sitúa su mirada en Nueva York como valor constante. El blanco y negro, el color y el 3D se unen para dibujar la evolución humana: del sombrero a la cultura del móvil y el autismo. También los estancos han cambiado por cafeterías. La cultura de youtube y los microcosmos en los móviles, apartan de la realidad al individuo… pese a que ésta sea ‘irreal e ilógica’.
El futuro… Cien años… La Apocalipsis y en fin… el fin. Eso sí, el corto debería titularse “A Morning Troll”, porque para troll este gallo.
La historia es sencilla: un pollo y un hombre se cruzan en medio de una calle y la persona se queda paralizada al ver que el pollo sube las escaleras de una casa residencial, llama con su pico a la puerta… y una vez que se abre desaparece en el interior. Pero esa misma historia nos es contada en 1959, 2009 y 2059 para jugar con la evolución en la animación, cultura musical y cinematográfica y dibujar un futuro distópico y apocalíptico. Desde las simples líneas al color y las imágenes en dos dimensiones para pasar al 3D y la renderización, “A Morning Stroll” es consciente de los avances de la animación y sitúa su mirada en Nueva York como valor constante. El blanco y negro, el color y el 3D se unen para dibujar la evolución humana: del sombrero a la cultura del móvil y el autismo. También los estancos han cambiado por cafeterías. La cultura de youtube y los microcosmos en los móviles, apartan de la realidad al individuo… pese a que ésta sea ‘irreal e ilógica’.
El futuro… Cien años… La Apocalipsis y en fin… el fin. Eso sí, el corto debería titularse “A Morning Troll”, porque para troll este gallo.
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