arrow

Pasión y poder (Serie de TV) (1988)

Pasión y poder (Serie de TV)
30 min.
Disponible en:
Suscripción
Sinopsis
La trama gira en torno a dos dramas familiares, su rivalidad por el poder en el ámbito empresarial, una mujer en disputa y la relación existente entre los primogenitos. La enemistad que por años ha perdurado tiene su origen cuando Arturo Montenegro y Eladio Gómez Luna, luchan por el amor de Ana Laura, quien al final optó por Eladio para casarse con él. Ha transcurrido el tiempo y Ana Laura ha sido una mujer infeliz, la amargura y abusos de su marido han hecho de ella una mujer temerosa y gris, su único consuelo es el amor de Federico, su hijo, una total antítesis de su padre, y el regreso de Arturo a su vida, ahora casado con Nina y cuatro hijos. (FILMAFFINITY)
Género
Serie de TV Drama Melodrama Telenovela
Dirección
Reparto
Año / País:
/ México México
Título original:
Pasión y poder
Duración
30 min.
Guion
Música
Fotografía
Compañías
Links
7
Lo blanco, lo negro
Durante los años 80 y con casi la única opción de entretenimiento a la mano para la mayor parte de la población en México, el monopolio encabezado por Emilio Azcarraga consolidaba la producción de telenovelas como su mayor producto de consumo interno e incluso de exportación, que acrecentó su poderío sobre la conciencia colectiva y que perduraron por lo menos tres décadas.

Si bien el subgénero de la telenovela es el más denostado por su corto alcance en el desarrollo de historias de fondo, en México hubo algunos títulos que trataron de salirse de los cánones establecidos por la estructura establecida en las oficinas del corporativo y validadas por gobernación, para concretar algunos proyectos medidos pero con nuevas variantes. «Pasión y poder» fue posiblemente uno de ellos, siendo uno de los grandes aciertos para el emporio.

Un proyecto de alto contraste manifestado en un bicromático de blancos y negros en el vestuario y las atmósferas en representación del bien y el mal; en la pugna entre dos familias por el poder en los negocios y el dominio que puedan ejercer sobre el otro o todo aquello que han considerado suyo y con posibilidades para poseerlo.

Con un reparto formidable «Pasión y poder» dio esa credibilidad suficiente para adentrar al televidente en un juego de tretas orquestadas por el villano de la historia, Eladio Luna (Enrique Rocha), quien con su magnífico trabajo fue capaz de crear una tensión escénica única con respecto a interpretaciones masculinas en la televisión mexicana de todos los tiempos.

En conclusión, algunas de las historias de antes eran conformadas por directores y talento artístico más enfocado en representar a cabalidad historias ecuánimes y dejar de lado el narcisismo, que las nuevas generaciones tiene al estar más preocupadas por los encuadres y las luces que por los personajes en cuestión.
[Leer más +]
Sé el primero en valorar esta crítica
Relaciones 1
Más información sobre Pasión y poder (Serie de TV)
Fichas más visitadas